Genio contra voluntad

Sopl¨® con fuerza el viento y se convirti¨® en un enemigo a?adido para los tres j¨®venes espadas. El molesto viento por un lado y el genio y hasta cierta violencia en los novillos de Manolo Gonz¨¢lez, fueron una prueba de nivel para los toreros, que burlaron ambas circunstancias con voluntad y hasta agunas dosis de acierto.

No fue f¨¢cil la novillada, tampoco imposible, pero a novilleros tan inexpertos les parecer¨ªa m¨¢s complicada de lo que en realidad fue. El mejor parado, y el m¨¢s brillante, fue David Garc¨ªa. Este alumno de la Escuela Taurina de Valencia tiene personalidad, adem¨¢s de un claro sentido del temple y un evidente gusto por el buen toreo. Su primera faena mantuvo esas virtudes, aunque en ocasiones perdiera lustre tanto por la flojedad del novillo como por el fuerte viento. Fue una faena salpicada de detalles, sin rematar pero de muy buen concepto.

Al sexto lo salud¨® hasta con cinco largas de rodillas, en cinco puntos diferentes del ruedo, tal era la distracci¨®n del eral. Otra vez el viento y la condici¨®n de un novillo que s¨®lo ten¨ªa medio viaje, le impidi¨® montar una faena que volvi¨® a presentar buen gusto. En esta ocasi¨®n la voluntad estuvo por encima de cualquier otra virtud. Pero la apuesta por el buen toreo la volvi¨® a dejar en el ruedo.

El Javi es novillero veterano en estas lides. Se le nota la experiencia y los recursos que utiliza para solventar la papeleta. Su primera faena fue larga y de chico espabilado ante un eral corto de embestida. El cuarto, muy descompuesto y con genio, le puso m¨¢s complicada la faena. No termin¨® de acoplarse El Javi en una labor de pelea, de muletear entre las piernas con el objetivo principal de salvar la violencia del animal. Fue una lucha entre listos: por un lado el eral y por otro el novillero.

El peor lote, con diferencia, fue para Francisco Javier Bernal, alumno de la Escuela Taurina de Alicante. Sac¨® genio su primero y Bernal pas¨® agobio en la muleta. Ese novillo descubri¨®, no obstante, un buen pit¨®n izquierdo y por ah¨ª luci¨® m¨¢s una faena que acab¨® muy desigual. El quinto a¨²n se lo puso peor, distra¨ªdo y muy corret¨®n adem¨¢s de dolerse descaradamente en banderillas, sac¨® violencia y peligro en la muleta. Buscaba el bulto el novillo y Bernal, entre apuros y una seria voltereta, mulete¨® con voluntad. El alumno de la Escuela de Alicante suspendi¨® en una de las asignaturas m¨¢s importantes: la espada. Presenta muy deficientes formas de entrar a matar y por ello perdi¨® en su primero un premio mayor.

Los dos alumnos de la Escuela de Valencia, sin ser grandes estoqueadores mostraron mayor habilidad a la hora de manejar la tizona. Con el capote estuvieron muy variados y ofrecieron quites de diversa condici¨®n.