UN QUIJOTE ATREVIDO Y PROVOCADOR
Dulcinea en la piel del joven Juan Diego Botto, Sancho Panza interpretado por el c¨®mico de televisi¨®n Carlos Iglesias, y Juan Luis Galiardo como caballero andante. La adaptaci¨®n de 'El Quijote' de Guti¨¦rrez Arag¨®n ser¨¢ toda una sorpresa
'El Quijote no lo podr¨ªa hacer ning¨²n villano, su mirada debe estar ausente de chorizismo', dice Galiardo
?sta es la historia de varios quijotes en busca de uno verdadero. Es la historia de un actor, Juan Luis Galiardo, que puso a prueba su resistencia f¨ªsica y ps¨ªquica para darle alma al caballero hambriento, so?ador y lun¨¢tico de la armadura abollada; de un productor, Juan Gona, que ha reunido m¨¢s de 4,8 millones de euros y que se meti¨® hasta el tu¨¦tano en un proyecto que ha durado cuatro a?os y acerca del que iba avisado por el director, Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n. ?ste, cuando Gona le propuso dirigir la segunda parte de El Quijote -la primera la hab¨ªa rodado el realizador c¨¢ntabro para televisi¨®n-, le dijo: 'El Quijote no, Gona, que tienes hijos peque?os'.
Y es la historia de un cineasta obsesionado desde ni?o con el caballero andante creado por Miguel de Cervantes, que ha reunido un equipo t¨¦cnico y art¨ªstico de primera para redondear su sue?o y algunos ensue?os que impactar¨¢n al p¨²blico en una versi¨®n llena de sorpresas, como la transformaci¨®n de Dulcinea en un hombre, Juan Diego Botto, que aparece encantado y con un mon¨®logo medido y preciso del actor, tal como Cervantes describe en el libro, cuando relata la aparici¨®n del paje Tosilos convertido en la amada del caballero.
Se acaba de anunciar. El caballero Don Quijote, as¨ª se titula la pel¨ªcula, acudir¨¢ a la Secci¨®n Oficial de la Mostra de Venecia pero fuera de concurso. En la ciudad italiana estrenar¨¢ internacionalmente el filme que se ver¨¢ en Espa?a a mediados de noviembre despu¨¦s de una gira intensa por otros festivales como el de Nueva York o el de Valladolid. Galiardo, actor de car¨¢cter y furia, ve ahora que su esfuerzo mereci¨® la pena. 'Ha sido el rodaje m¨¢s duro de mi vida, el que he vivido con m¨¢s tensi¨®n, pero ahora me doy cuenta de que todo el esfuerzo ha sido por algo, que toda la lucha con la parcela de cada uno, entre el director, el c¨¢mara, el productor, los actores, los maquilladores, por hacer valer nuestros tiempos han dado un fruto', cuenta.
Galiardo ha realizado as¨ª uno de sus sue?os. Admiraba al Quijote desde que se lo encontr¨® en un internado de Extremadura. No lo ley¨®. Se lo leyeron: 'Dos veces. En el internado de San Jos¨¦, en Villafranca de los Barros, provincia de Badajoz. Una vez lo hizo el padre Arana y otra vez un profesor que se llamaba Ricardo de la Cierva, que lleg¨® a ministro'.
Galiardo llega fresco, viene de nadar. Se mantiene en forma el actor nacido en San Roque, C¨¢diz, en 1940. Sin esa energ¨ªa, este personaje que ha sido bailar¨ªn de cabaret en sus comienzos y ha ganado un Goya en 2001 por Adi¨®s con el coraz¨®n, de Jos¨¦ Luis Garc¨ªa S¨¢nchez, no hubiese resistido el trote de una pel¨ªcula como ¨¦sta. 'Pas¨¦ varias fases. Primero adelgac¨¦ 15 kilos y me present¨¦ en el despacho del productor, donde, con el director tambi¨¦n presente, me puse en pelotas y dije: 'As¨ª he quedado. A ver si os apiad¨¢is de estas pobres carnes y me d¨¢is el papel'. La prueba les convenci¨®. Desde entonces, Galiardo se meti¨® en la harina del caballero andante, con dos horas de maquillaje diarias en tres meses de rodaje, cabalgadas bajo el sol de justicia castellano y andaluz, ca¨ªdas del caballo... 'Ha sido un proceso de dolor, pero nada se consigue sin sufrimiento', asegura. Junto a ¨¦l, un reparto en el que destacan Carlos Iglesias, como Sancho Panza, y Manuel Manqui?a, Santiago Ramos, Emma Su¨¢rez, Marta Etura o Manuel Aleixandre.
Galiardo cuenta su enfoque. 'Es un personaje medio loco, medio hidalgo. Yo ya ten¨ªa medio camino recorrido, porque hace a?os que vengo de la locura hacia una m¨¢s que respetable cordura', dice. Cree que le ha dado al personaje un punto atl¨¦tico, un gramo de locura y otro ingrediente: 'El compromiso. Soy un hombre comprometido y con ideales. El Quijote nunca lo podr¨ªa hacer ning¨²n villano zafio, aunque tenga la planta. Su mirada debe estar exenta de chorizismo', afirma.
Y amistad. Porque El caballero Don Quijote destila su historia de amistad y lealtades, dice Carlos Iglesias. El actor, que se ha hecho archipopular con sus apariciones en programas de televisi¨®n como Esta noche cruzamos el Misisipi o la serie Manos a la obra, seg¨²n Gutierrez Arag¨®n, va a ser 'una aut¨¦ntica sorpresa' para el p¨²blico. El int¨¦rprete del fiel escudero destaca: 'Quijote y Sancho son amigos y polos opuestos. Sancho necesita bajar de las nubes a su se?or pero tambi¨¦n entra en su juego, al aceptar que le dar¨¢ su ¨ªnsula de Baratalia'.
Juntos forjan esta pel¨ªcula de aventuras, ensue?os y humor, 'la primera gran parodia de la historia', destaca Guti¨¦rrez Arag¨®n, en la que se habla del amor, el compromiso, la solidaridad, el escape de la realidad, la libertad, los sue?os... Todo bajo un punto de vista de atrevimiento de su director, que avisa antes de que le vengan con reproches: 'Me preguntar¨¢n muchas veces si he sido fiel o no a la obra. Yo he seguido la partitura y, como todo el mundo sabe, de la partitura salen interpretaciones variadas', afirma.
Su Quijote es una buena forma de festejar 30 a?os de carrera. En 1972, Guti¨¦rrez Arag¨®n rodaba Habla, mudita, que acudi¨® al Festival de Berl¨ªn y consegu¨ªa el Premio de la Cr¨ªtica. As¨ª nac¨ªa un director con t¨ªtulos fundamentales y premios en todo el mundo con pel¨ªculas como Camada negra, Demonios en el jard¨ªn, Son¨¢nbulos o La mitad del cielo, adicto al riesgo, con un mundo propio, personal, que no ha dejado de buscar caminos desde entonces y que, seg¨²n su productor en este proyecto, Juan Gona, un asturiano que va por libre, 'ha logrado un giro m¨¢s en su trayectoria con este Quijote'. Seg¨²n ¨¦l, 'Guti¨¦rrez Arag¨®n sorprender¨¢ porque ha emprendido un nuevo concepto narrativo, pero con la ventaja que da ser ya un maestro'.
La influencia consciente y confesada que ha tenido Guti¨¦rrez Arag¨®n en esta obra ha sido la de casi siempre desde que pas¨® una infancia devoradora de libros en su Torrelavega natal este autor que ha sido etiquetado como realista y m¨¢gico: 'Miguel de Cervantes. ?l ha influido en mi carrera mucho m¨¢s siempre que cualquier cineasta de los que he admirado', afirma.
?Y por qu¨¦? 'Bien sencillo. Cervantes es un escritor realista pero sobre todo, es el autor que mejor ha sabido estirar las fronteras de la realidad hasta llegar lo m¨¢s lejos posible'.
Cinemascope, escenarios naturales y 1.200 trajes
Cuando se decide hacer una obra como El Qujote no hay que andar con miserias. Por eso, en la factura de la pel¨ªcula que ha dirigido Manuel Guti¨¦rrez Arag¨®n se nota el rastro de varios de los mejores t¨¦cnicos y artistas del cine espa?ol. M¨²sica de Jos¨¦ Nieto, que ha utilizado una orquesta de 97 m¨²sicos entre la Orquesta Ciudad de Oviedo y los Virtuosos de Mosc¨². Fotograf¨ªa de Jos¨¦ Luis Alcaine, que ha tenido la audacia de mover tres c¨¢maras de cinemascope, incluso debajo del agua, para atender los caprichos del cineasta c¨¢ntabro, que se ha mostrado bastante exigente, seg¨²n algunos compa?eros de rodaje. Direcci¨®n art¨ªstica de Gerardo Vera, que ya casi se hab¨ªa pasado por completo a los oficios de la realizaci¨®n pero no ha podido dejar pasar una oportunidad como ¨¦sta. Aparte de coordinar la utilizaci¨®n de 1.200 trajes para, a veces, 800 extras, Vera ha sabido integrar en la fantas¨ªa junto a F¨¦lix Murcia decorados naturales como el Castillo de Belmonte, en Cuenca, o la Casa de Pilatos y los Reales Alc¨¢zares, de Sevilla. Todo ha corrido a cargo de los m¨¢s de 4,8 millones de euros de presupuesto que han salido de las cuentas de Gona Producciones y de las colaboraciones de varios canales de televisi¨®n como Telemadrid, Televisi¨®n de Castilla La Mancha, Televisi¨®n Espa?ola y Canal Plus, adem¨¢s de Cartel y la Sociedad Estatal de Conmemoraciones. Este ¨²ltimo organismo ha participado en la producci¨®n para calentar motores con vistas al 400 aniversario de la aparici¨®n de la obra de Miguel de Cervantes, que se festejar¨¢ en el 2005.
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