Edimburgo literario

Relacione: Edimburgo, Robert L. Stevenson y Fernando Savater.

Hablar¨¦ del verano de 1984, cuando emprend¨ª un viaje a la capital escocesa despu¨¦s de haber le¨ªdo un art¨ªculo de Savater en el que hablaba de la ruta del autor de La isla del tesoro por Edimburgo.

Eso le convierte en un trotamundos rom¨¢ntico. Apuesto a que viaj¨® en tren.

S¨ª, desde Londres hasta Edimburgo. En uno de esos trenes de pel¨ªcula de Hitchcock, con ese ambiente y esas puertecillas laterales. Recuerdo el paisaje verde y lo que disfrut¨¦ de aquellas cuatro horas de trayecto.

?Qu¨¦ huellas dej¨® Stevenson all¨¢?

Para empezar, varias casas en las que vivi¨®, porque o era un esp¨ªritu inquieto o iba dejando pufos. Eran de esas casitas con estanque, muy bonitas. Tambi¨¦n estuve en el bar donde supuestamente escribi¨® El doctor Jeckyll y mister Hyde.

Lo imagino cual personaje de novela, en medio de la niebla y a altas horas de la madrugada...

Edimburgo resulta un poco siniestra, por esa luz mortecina y nebulosa a juego con la arquitectura. Pero a m¨ª me van esos entornos taciturnos, porque el sol radiante me resulta agresivo.

?Para dar buena cuenta de la cerveza en los pubs?

No, porque soy abstemio total. Pero me llam¨® la atenci¨®n la cantidad de se?oritas solas y piripis que hab¨ªa desde las cinco de la tarde. No sab¨ªa que all¨ª se bebiera tanto... Pero lo que me gust¨® de los pubs fue ese ambiente de la madera rancia y oscura, y las fotos y cuadros de las paredes.

Sigue sonando tremendamente literario.

Precisamente, visit¨¦ varias librer¨ªas de viejo, y compr¨¦ algunos libros que no he le¨ªdo, pero que me encantaron, porque soy un poco fetichista. Tambi¨¦n soy forofo de los huevos, y resulta que en Edimburgo est¨¢ el famoso cuadro de Vel¨¢zquez de la Vieja friendo huevos, as¨ª que disfrut¨¦ much¨ªsimo.

Veo que ha encontrado su destino perfecto.

Bueno, pero entiendo que Robert L. Stevenson se fuera a los mares del Sur. Edimburgo resulta un poco provinciana. Me encant¨®, pero yo soy muy cosmopolita. As¨ª que tras cuatro d¨ªas en Escocia, pas¨¦ dos en Londres y termin¨¦ un viaje redondo.