La victoria de los sue?os

Y mira por donde, en el a?o de la Copa del Mundo de f¨²tbol, Argentina vence a Estados Unidos en baloncesto. Los saltos de alegr¨ªa que daban anoche en Indian¨¢polis esos doce obeliscos abrazados entre s¨ª hac¨ªan temblar el centro de Buenos Aires. Los golpes al tambor del coraz¨®n retumbaban ensordecedores y ahogaban la emoci¨®n de cientos de miles de compatriotas desparramados por el mundo. El deporte argentino es uno de los pocos r¨ªos vitales de la sociedad que no reduce nunca su caudal de energ¨ªa. Por su sangre corre siempre la ilusi¨®n de los equipos o los jugadores de f¨²tbol a los que se acompa?a y se sigue desde el muelle de la televisi¨®n, tambi¨¦n a los del rugby, hockey sobre hierba, boxeo, tenis y a los del baloncesto, en Italia y Espa?a los ¨²ltimos a?os. La del baloncesto fue la victoria de los sue?os frente al llamado Dream Team.

Hab¨ªa una vez un entrenador, Le¨®n Najnudel, que deliraba por las arenas del desierto baloncesto argentino hace ya unos veinte a?os reclamando la organizaci¨®n de una Liga Nacional que abriera la competici¨®n del c¨ªrculo cerrado de Buenos Aires a todo el pa¨ªs. Le¨®n se revolv¨ªa, gritaba, propon¨ªa, luchaba para que en ese deporte se hiciera la revoluci¨®n reclamada. Le desbordaba la pasi¨®n y fue tan grande su esfuerzo que muri¨® al cruzar la meta, consumido por el c¨¢ncer. Pero all¨ª est¨¢ hoy la Liga en acci¨®n, despertando el inter¨¦s y el orgullo en pueblos y ciudades remotas, promoviendo jugadores de calidad que, como los pibes futbolistas, alcanzan el m¨¢ximo grado de rendimiento cuando terminan de formarse en la competici¨®n europea.

La noticia de la hist¨®rica victoria ante Estados Unidos se destacaba ayer en la portada de todos los peri¨®dicos no s¨®lo por la altura y el cuerpo de los titulares, sino porque la fotograf¨ªas de los festejos enmarcaban un brillante cuadro de luz en medio de la noche cerrada del drama econ¨®mico. 'Rechaz¨® Estados Unidos el plan para acordar con el Fondo Monetario Internacional...', dec¨ªa La Naci¨®n y, debajo del texto y por encima de una serie de camisetas albicelestes abrazadas entre s¨ª, informaba: '... Pero el baloncesto argentino cambi¨® la historia'. La satisfacci¨®n por la m¨ªnima revancha no estaba escrita pero pod¨ªa leerse a simple vista y o¨ªrse tambi¨¦n en los mensajes que los oyentes hac¨ªan llegar a las emisoras de radio. 'El baloncesto, en su triunfo m¨¢s glorioso', dec¨ªa Clar¨ªn. Para el deportivo Ol¨¦, sobre la fotograf¨ªa de un espectacular salto de Nocioni, todav¨ªa en el aire, s¨®lo cab¨ªa titular: '?Yes!'.

Los aficionados y los analistas destacaron, a modo de ejemplo, la solidaridad y la humildad del equipo. El entrenador, Rub¨¦n Magnano, pens¨® en la gente que iba a seguir el partido desde Argentina antes que en la conveniencia de evitar el desgaste f¨ªsico frente a un equipo que, en principio, parec¨ªa invencible. Y a ellos dedic¨® el triunfo: 'Quer¨ªamos darle una alegr¨ªa al pueblo, yo espero que la gente disfrute mucho de esta actuaci¨®n. Por encima de las cuestiones t¨¢cticas y t¨¦cnicas estuvo el esp¨ªritu de lucha de este equipo; es una muestra m¨¢s de lo que se puede lograr cuando alguien quiere algo y no lo da por perdido antes de comenzar'.

Los jugadores dedicaron el triunfo a Diego Maradona y lo festejaron en el hotel. Pero ayer por la ma?ana se encargaron de rebajar la euforia a su justo punto. Luis Scola advert¨ªa: 'Si no ganamos en cuartos de final esto no habr¨¢ servido para nada. Vinimos ac¨¢ a buscar una medalla, no a ganarle al Dream Team'. Alejandro Montecchia juraba a todos que hab¨ªa so?ado con el triunfo: 'Lo so?¨¦ a la noche y lo volv¨ª a so?ar en la siesta, so?¨¦ que pod¨ªamos ganar este partido'. Emanuel Gin¨®bili, una de las figuras destacadas del equipo argentino y jugador de la NBA en la pr¨®xima temporada, coincid¨ªa con Scola: 'No vinimos a buscar una victoria contra Estados Unidos, pero debo reconocer que esto es algo muy grande porque nosotros estamos acostumbrados a emocionarnos al ver jugar al Dream Team y seguimos la actuaci¨®n de los grandes jugadores de la NBA'. Poco antes de disputar anoche el cl¨¢sico suramericano frente a Brasil, Andr¨¦s Nocioni trataba de olvidar lo que seguramente recordar¨¢ en detalle toda la vida. Para convencerse a s¨ª mismo, dec¨ªa: 'Tenemos que estar fuertes y pensar que esto no pas¨®, porque es demasiado grande lo que hicimos. Todo esto va a servir si el domingo nos cuelgan una medalla en el pecho'.