Los Rolling Stones llevan su energ¨ªa explosiva a Nueva York
'Esto no es algo de lo que te retiras', comenta Keith Richards
Lo normal ser¨ªa que los Rolling Stones estuvieran disfrutando tranquilamente de sus millones recordando viejos tiempos. Pero no. Despu¨¦s de 40 a?os en los escenarios, el m¨ªtico grupo ha vuelto a la carretera en una gira mundial que empez¨® en Boston a principios de este mes y que el pasado jueves por la noche les llev¨® hasta el Madison Square Garden de Nueva York ?Demasiado viejos? Por lo visto, no.
'La gente nos critica porque est¨¢ gorda y calva. Es envidia f¨ªsica. Se preguntan: ?c¨®mo podemos desafiar la l¨®gica?', se jactaba Keith Richads en una reciente entrevista. Ya los han enterrado m¨¢s de una vez. En 1978, un art¨ªculo de la revista Rolling Stone los trataba de 'viejos veteranos, mermados por la edad y el vicio', aunque tambi¨¦n admiraba su resistencia. 'El rock exige un cierto nivel de energ¨ªa', explicaba Mick Jagger, 59 a?os, al New York Times esta semana; 'no puedes hacer rock sentado en una bicicleta a 10 por hora. No es que debas ser un m¨²sico brillante, pero s¨ª necesitas un tipo de energ¨ªa explosiva para tocar bien el rock. Es lo que tenemos'.
Lo bastante como para llenar hasta la bandera el Madison Square Garden, el primero de sus tres conciertos en Nueva York, ciudad a la que Jagger, Richards, Charlie Watts y Ron Woods volver¨¢n en enero para otros dos eventos. 'Esto no es algo de lo que te retiras', comentaba Richards, 'es tu vida. Escribir canciones y tocar es como respirar. No puedes parar'.
Y durante m¨¢s de dos horas no pararon. Como ya lo hicieran al inaugurar su gira en Boston, abrieron con Street Fighting Man y siguieron con algunos de sus cl¨¢sicos, Satisfaction, Brown Sugar o Simpathy for the Devil, aunque se centraron sobre todo en su ¨¢lbum Exile on Main Street, del que sacaron Loving Cup, Rocks Off y Tumbling Dice.
Los veteranos volvieron a gustar. 'Keith Richards es un extraordinario guitarrista, sobre todo cuando no toca: sus acordes de blues se llenan de silencios, que les dan tanta energ¨ªa, como rocas emergiendo de un mar revuelto', subrayaba ayer la cr¨ªtica del New York Times. 'Los Stones siguen teniendo una magia que les permite recuperar sus viejos ¨¦xitos y darles nueva vida', dec¨ªa el Daily News.
Los Stones ya no tienen nada que demostrar. El grupo que m¨¢s ha influido en el rock de estos ¨²ltimos 35 a?os -Tom Wolfe dijo una vez: 'Cuando los Beatles cantaban sobre darse la mano, los Rolling Stones quer¨ªan quemar la ciudad'- es tambi¨¦n el m¨¢s rico. Tan s¨®lo el Woodoo Lounge Tour se llev¨® en 1994 el r¨¦cord de 124 millones de d¨®lares. Seg¨²n la revista Fortune, los cuatro miembros, asesorados desde hace 30 a?os por un hombre de negocios de t¨ªtulo aristocr¨¢tico, el pr¨ªncipe Rupert Zu Loewenstein, est¨¢n a la cabeza de un grupo que incluye empresas subsidiarias como Pronotour, Promopub, Promotone y Musidor, que se encargan de todos los aspectos de la promoci¨®n.
Se calcula que los Stones han ganado m¨¢s de 1.000 millones de d¨®lares en sus giras. La entradas al Madison Square Garden empezaban en los 300 d¨®lares (308 euros). Fortune tambi¨¦n estimaba que Jagger y Richards han ganado unos 56 millones de d¨®lares s¨®lo en derechos de autor, por permitir el uso de su m¨²sica en cine o anuncios.
![Ron Wood (izquierda) y Keith Richards, durante el concierto en Nueva York.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/PLF2FO7KMYPRSFRFB47KXSR6GU.jpg?auth=6492a94f2e26aaad2ce36cffbe1167a361397829116fd835619bb67775bb4049&width=414)
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