'Caiga quien caiga' vuelve a Tele 5 con una sola edici¨®n semanal
Wyoming se transforma en psicoanalista para descifrar el comportamiento de los pol¨ªticos
El doble formato semanal (s¨¢bados y domingos) de Caiga quien caiga, experimentado la temporada pasada, deja paso a una ¨²nica edici¨®n, recuperando as¨ª el original. En esta nueva etapa, que arranca ma?ana (15.30), El Gran Wyoming abandona el papel del reaccionario empresario editorialista y se mete en la piel de un psicoanalista que examinar¨¢ el comportamiento de los pol¨ªticos.
Caiga quien caiga se ha convertido en el programa m¨¢s duradero de Tele 5. En antena desde 1996, ha sobrevivido incluso al original, desaparecido ocasionalmente de la televisi¨®n argentina. En la nueva temporada se concentrar¨¢ en una ¨²nica edici¨®n semanal: la sobremesa del domingo, una ubicaci¨®n sobre la que no hay discusiones. 'En los programas de prime time no tenemos hueco. La gente va all¨ª a decirse cosas a la cara y citarse en los juzgados. Nosotros hablamos a la c¨¢mara', explica Jos¨¦ Miguel Monz¨®n, El Gran Wyoming. A?ade que el espacio se ha consolidado gracias 'al apoyo de la afici¨®n', que en n¨²meros se traduce en 2,2 millones de espectadores.
Esta temporada, El Gran Wyoming se transforma en un psicoanalista de cabecera para descifrar el comportamiento de los pol¨ªticos. Su primer paciente ser¨¢ un alto cargo del Gobierno. Esta f¨®rmula le permitir¨¢ ahondar en la cr¨ªtica pol¨ªtica y poner contra las cuerdas tanto al Gobierno como a la oposici¨®n, una tarea cada vez m¨¢s escurridiza, ya que algunos pol¨ªticos han optado por darles la espalda. 'Aznar no nos considera', lamenta Juanjo de la Iglesia; mientras que Javier Mart¨ªn apunta: 'No le debimos caer bien cuando nos invit¨® a comer a La Moncloa'. Y Wyoming remacha: 'No existimos para Aznar porque su carga afectiva y pol¨ªtica -y tambi¨¦n los decretos- van dirigidos a los suyos y a sus votantes'. A la hora de evaluar el estado de la televisi¨®n, sostiene que 'la cr¨ªtica pol¨ªtica no existe. Quiz¨¢ por eso nos hemos convertido en una rara avis. Vivimos en un r¨¦gimen involucionista y sin hacer nada, nosotros cada vez somos m¨¢s progresistas'.
En su regreso, los hombres de negro dar¨¢n otra vuelta de tuerca a la boda Aznar-Agag, acudir¨¢n al Festival de Cine de San Sebasti¨¢n y se unir¨¢n a las conmemoraciones del 11-S en Nueva York.
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