Isabel la Cat¨®lica tendr¨¢ que esperar

La parafernalia con que los obispos espa?oles quer¨ªan celebrar en 2004 el quinto centenario de la muerte de Isabel la Cat¨®lica acaba de apagarse por donde m¨¢s quer¨ªa alumbrar: la beatificaci¨®n de tan famosa reina y se?ora. Roma ha dicho que no, al menos de momento, a la causa de beatificaci¨®n promovida desde el Arzobispado de Valladolid en 1952 y reactivada por la Conferencia Episcopal Espa?ola en el plenario de los prelados de marzo pasado.

Las causas de este bloqueo, que parece definitivo, las explic¨® en Madrid este jueves el monse?or romano Flavio Capucci, durante una cena con varios periodistas. Capucci ha sido el postulador oficial de la exitosa y veloz causa de canonizaci¨®n del fundador del Opus Dei, Josemar¨ªa Escriv¨¢ de Balaguer, que Juan Pablo II culmina el pr¨®ximo d¨ªa 6 de octubre en Roma, en una ceremonia a la que acudir¨¢n peregrinos de 84 pa¨ªses.

Comprometida la Conferencia Episcopal en esa causa, parec¨ªa que la pol¨¦mica beatificaci¨®n de Isabel la Cat¨®lica ser¨ªa imparable y r¨¢pida, pero ya entonces el 25% de los obispos se opuso a avivar el proceso. ?Motivos? Los mismos que ahora insinua el eficaz postulador del Opus: evitar pol¨¦micas con la comunidad jud¨ªa, que no perdona a la reina bajo cuyo mandato se produjo la expulsi¨®n de Espa?a de ese pueblo en unas condiciones consideradas ahora como insoportables. En cambio, Roma sostiene la beatificaci¨®n del papa P¨ªo XII, tambi¨¦n se?alado por los jud¨ªos como sospechoso de guardar silencio ante el holocausto sufrido por ese pueblo a manos del Hitler.

La muchas voces que protestaron en marzo el anuncio de la posible beatificaci¨®n de la soberana ampl¨ªan tambi¨¦n sus reparos al papel de la cat¨®lica reina en la creaci¨®n de la Inquisici¨®n y en un descubrimiento de Am¨¦rica que tuvo m¨¢s de conquista que de evangelizaci¨®n. El Arzobispado de Sevilla, por cierto, ha anunciado la semana pasada su intenci¨®n de dar un nuevo impulso a la causa de beatificaci¨®n del obispo que amarg¨® con sus execraciones aquel Descubrimiento de lo existente: Bartolom¨¦ de las Casas, primer obispo de Chiapas.

Para que una causa de santificaci¨®n tenga ¨¦xito se necesitan requisitos que no se cumplen en el caso de Isabel la Cat¨®lica, tales como la existencia de una devoci¨®n popular y la certeza de que es objeto de rezos y peticiones. 'Sin esas condiciones, una causa no tiene posibilidades', explic¨® Flavio Capucci con la intenci¨®n de ponderar lo que s¨ª hab¨ªa ocurrido en la causa de santificaci¨®n de Escriv¨¢. 'No s¨®lo fue santo ¨¦l, sino que fue padre y maestro de santos', dijo. El Opus lleva ya muy adelantadas las causas de beatificaci¨®n de siete de sus miembros, y pronto iniciar¨¢ la del sucesor de Escriv¨¢ al frente de la Prelatura, ?lvaro Portillo.

'Tras la beatificaci¨®n han desaparecido las pol¨¦micas y este clima tranquilo se debe a que para los cat¨®licos las canonizaciones hay que creerlas sobre la base de la infalibilidad pontificia. Cualquier cat¨®lico tiene conciencia de que el santo es un modelo para todos los cristianos y que no se le puede considerar una figura problem¨¢tica o conflictiva', a?adi¨® el postulador de la causa del fundador del Opus.