Rogelio, el ¨²ltimo tendero de Canalejas
Una galer¨ªa subterr¨¢nea, que en su tiempo lleg¨® a albergar 36 comercios, conserva s¨®lo un establecimiento de bocadillos
La esperanza de Rogelio Rodr¨ªguez Ord¨¢s, el ¨²ltimo comerciante que sobrevive como puede con su peque?o negocio de venta de bocadillos en los s¨®tanos de la plaza de Canalejas (Centro), es que se le haga realidad el sue?o de ver renacer la galer¨ªa, abandonada y convertida en una especie de agujero negro en el que s¨®lo sus clientes de toda la vida entran de vez en cuando.
Cuenta Rogelio que hace 15 a?os la galer¨ªa de la plaza estaba 'en todo su apogeo'. Hab¨ªa all¨ª 36 locales comerciales de todo tipo: tiendas de ropa, cafeter¨ªas, una agencia de viajes y varios establecimientos m¨¢s. Pero de aquello ya no queda nada. La impresi¨®n es que esta galer¨ªa se cae a pedazos. La iluminaci¨®n es escasa, las goteras se hacen gigantes, los ba?os son inutilizables y las escaleras mec¨¢nicas de los accesos a la calle no funcionan. A veces esas entradas se convierten en el refugio de mendigos cuya presencia aleja a posibles clientes. Tan s¨®lo con imaginaci¨®n -porque no tiene m¨¢s recursos-, Rogelio, de 62 a?os, ha colocado en las entradas de la galer¨ªa unos carteles en los que invita a los transe¨²ntes a degustar de sus 'exquisitos' bocadillos, los ¨²nicos artesanales que, seg¨²n dice, quedan en Madrid.
'Esto ha sido como una agon¨ªa. Es como una muerte a plazos', dice el propietario del local
La situaci¨®n de los bajos de la plaza de Canalejas comenz¨® a agravarse cuatro a?os atr¨¢s. Poco a poco comenzaron a irse los inquilinos, agobiados por la falta de p¨²blico y de mantenimiento del lugar. Cuatro de ellos, -incluido Rogelio-, acudieron a los juzgados para denunciar 'la dejadez' que padec¨ªan por parte de la empresa Establecimientos Guipuzcoanos, SA, (Eguisa). Esta compa?¨ªa hered¨® en 1995 la concesi¨®n administrativa que por 50 a?os hab¨ªa hecho el Ayuntamiento a otra empresa similar.
Las quejas de los inquilinos, sin embargo, no surtieron efecto. Y algunos, como Andr¨¦s Vara del Nacimiento, encargado de una cafeter¨ªa, decidieron marcharse. 'Yo ten¨ªa mi negocio desde 1966. Me fui porque ya no ganaba para vivir. Yo tengo 65 a?os y me jubil¨¦ a los 62. S¨®lo recibo 360 euros de pensi¨®n', relata.
Los pocos inquilinos que a lo largo de los ¨²ltimos cuatro a?os intentaron que se reanudara la actividad comercial de la galer¨ªa fueron tirando la toalla. S¨®lo Rogelio ha resisistido, convencido de que los 35 a?os que lleva dedicado a esa actividad no pueden tirarse por la borda.
'Esto ha sido como una agon¨ªa. Es como una muerte a plazos. Yo me pregunto, ?por qu¨¦ no interviene el Ayuntamiento?', dice Rogelio con voz entrecortada. 'La verdad es que en esta ciudad el peque?o comerciante est¨¢ asfixiado, est¨¢ cada vez peor. Si este lugar estuviera bien, aqu¨ª se podr¨ªa trabajar a tope. Yo he visto ah¨ª fuera gente esperando para comprar su bocadillo, pero ahora no se pueden tener clientes nuevos porque la gente no baja aqu¨ª', dice. Y a?ade: 'Yo resisto porque mis hijos me ayudan econ¨®micamente'.
La alegr¨ªa de Rogelio ahora es que, despu¨¦s de tantos a?os de aguantar la situaci¨®n, ha arrancado de la empresa Eguisa el compromiso de que se rehabilitar¨¢ la galer¨ªa y de que su establecimiento tendr¨¢ un lugar privilegiado.
Un portavoz de la empresa ha aclarado que la mayor¨ªa de los locales 'estaban abandonados' cuando Eguisa adquiri¨® la concesi¨®n. El abogado de la compa?¨ªa explica, adem¨¢s, que ya se ha completado el proyecto de remodelaci¨®n de la galer¨ªa, que adem¨¢s dar¨¢ sitio a los propietarios de una agencia de viajes que tambi¨¦n tiene su sede en este sitio.
'En este momento Canalejas tiene una galer¨ªa y un aparcamiento. El proyecto consiste en habilitar m¨¢s plazas de garaje y dejar s¨®lo uno de los cuatro pasos peatonales que hasta ahora tiene el recinto. Cerca de uno de esos accesos ir¨¢n el puesto de bocadillos de Rogelio y la agencia de viajes', se?ala el letrado de Eguisa. El plan, sin embargo, no tiene fecha. Depender¨¢ del visto bueno que le d¨¦ el Ayuntamiento. 'Ahora mismo el proyecto est¨¢ en estudio. Pero tendr¨¢ que pasar por el pleno antes de obtener luz verde', explican desde el Consistorio.
Rogelio Rodr¨ªguez Ord¨¢s espera con ilusi¨®n que las promesas de la empresa se hagan realidad. Son varios a?os ya, dice, aguardando que la situaci¨®n cambie y que pueda trabajar en condiciones, por lo menos hasta que cumpla la edad de jubilaci¨®n. Tiene muchas esperanzas, pero a veces duda: 'Yo ya me he reunido con los abogados y parece que esto pinta bien. Pero ojal¨¢ que no sean s¨®lo promesas. Y ojal¨¢ que comiencen pronto', concluye.
'La gente ya no pasa por aqu¨ª'
'Hace diez a?os que no pasa gente por aqu¨ª'. Lo dice Manuel Cuadrado S¨¢nchez, de 62 a?os, el propietario de una peluquer¨ªa de caballeros que se halla en la galeria comercial del aparcamiento de la plaza de las Descalzas, otro de los sitios en los que, como ocurre en la plaza de Canalejas, el apogeo comercial se ha ido esfumando a?o tras a?o. En esta plaza s¨®lo sobreviven Manuel y los due?os de una tienda de discos. Ambos dependen casi exclusivamente de sus clientes de toda la vida. Personas que conocen sus servicios y que les buscan all¨ª donde se encuentren. La situaci¨®n de esta galer¨ªa, al menos en lo que a la planta f¨ªsica se refiere, dista mucho de la de Canalejas, pero los inquilinos de los locales echan de menos el diario trasegar de personas. Eso acab¨® cuando se cambi¨® el acceso al aparcamiento. 'Antes la caja del parking estaba aqu¨ª, en esta galer¨ªa. En cuanto la quitaron la gente dej¨® de pasar', relata Manuel.
No muy lejos de all¨ª, en la galer¨ªa comercial de la plaza de Espa?a, el propietario de una tienda de discos se queja de la poca vigilancia que hay en los alrededores de la zona y que se traduce en una p¨¦rdida 'cada vez m¨¢s notable de clientes'. En ese sitio hay una agencia de viajes, una cafeter¨ªa y la tienda de discos. Las galer¨ªas comerciales que hay en Madrid han sido entregadas por el Ayuntamiento en concesi¨®n.
En el pasaje subterr¨¢neo de la plaza de Col¨®n tambi¨¦n hab¨ªa varios establecimientos comerciales cuyo contrato de alquiler ha caducado. S¨®lo permanece una agencia de viajes. El Consistorio estudia la posibilidad de cerrar el pasaje y sustituirlo por cruces peatonales regulados por sem¨¢foros de superficie. El destino del pasadizo podr¨ªa ser un cant¨®n de limpiezas.
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