'Jugar al l¨ªmite motiva'
Raynald Denoueix (Rouen, 1948) ofrece caf¨¦, ordena sus cuartillas y cruza la mano izquierda sobre el pecho en un gesto napole¨®nico que s¨®lo pretende tapar una marca deportiva ajena a la que viste a la Real Sociedad. El t¨¦cnico franc¨¦s, educado, met¨®dico y fiel a su idea valiente del f¨²tbol, ha revolucionado el juego del equipo donostiarra, tercer clasificado y m¨¢ximo goleador, con 13 tantos, de la Liga.
Pregunta. Tras 33 a?os de carrera en el Nantes, la Real Sociedad. ?Es una aventura?
Respuesta. No, es casi como si hubiese cambiado de club en Francia, salvo que aqu¨ª la Real est¨¢ en el centro de la vida de la regi¨®n, de lo que la gente aprecia. El club es un polo mucho m¨¢s importante de lo que era el Nantes en su entorno.
P. ?Qu¨¦ le choca?
R. Pocas cosas. Quiz¨¢s, las historias que escucho: el otro d¨ªa dijeron que me hab¨ªan detenido en la frontera para devolver un descodificador de Canal + o que obligaba a los jugadores a subirse y sentarse en el avi¨®n por orden alfab¨¦tico.
P. Philippe Bergeroo, el entrenador del Rennes, dice que la suya es 'una profesi¨®n de gilipollas, pero formidable'. ?Comparte esa apreciaci¨®n?
R. A veces, hay muy poca distancia entre la victoria y la derrota. Tanto en lo que sucede sobre el c¨¦sped como en la preparaci¨®n del partido. Pero, en cambio, existe un abismo entre lo que esa derrota provoca y lo que se dice acerca de esa derrota. De ah¨ª, las palabras de Bergeroo. Es un trabajo dif¨ªcil, en el que entre lo que uno hace y el resultado hay una gran distancia. Pero, como el f¨²tbol es imprevisible, hay que saber soportar sus consecuencias, que son tambi¨¦n imprevisibles.
P. ?Qu¨¦ responsabilidad tiene en los ¨¦xitos y los fracasos?
R. La importancia del entrenador tiene que ver con la idea de juego que va a transmitir, con la forma de comportarse sobre el c¨¦sped. El resto es f¨¢cil: la derrota es siempre la responsabilidad del entrenador. En la victoria, en cambio, no s¨¦ de qui¨¦n es el m¨¦rito. Podr¨ªa explicar los motivos de la derrota, discutirlos, argumentar sus razones aut¨¦nticas, pero al final, seguir¨ªa siendo, para todos, mi culpa.
P. Un a?o despu¨¦s de ganar la Liga francesa, en 2001, el Nantes le puso en la calle.
R. No se le concede tiempo al entrenador, no se le da un margen. Hoy en d¨ªa, es imposible trabajar a largo plazo como t¨¦cnico. Por lo menos, es imposible imponerlo, desearlo. Es el reflejo de la sociedad actual, que quiere tenerlo todo y r¨¢pido.
P. ?Es imposible edificar un proyecto?
R. Imposible, por lo menos con los jugadores profesionales. Para educar se necesita tiempo, un tiempo que no existe en el f¨²tbol. Es una de las paradojas del f¨²tbol. Por eso dice Bergeroo que es una profesi¨®n de gilipollas. Si se quiere ense?ar algo a los jugadores, y tienen mucho que aprender, respecto al juego, a la vida, al comportamiento..., hace falta tiempo. Y no lo hay. Esto funciona as¨ª y los entrenadores s¨®lo podemos denunciarlo.
P. ?Tienen mucho que aprender los jugadores de la Real?
R. Claro, como todos. Hay que aprender constantemente. Los jugadores tienen que entenderse los unos con los otros, aprender unos de otros, y el entrenador est¨¢ en medio para facilitar esto. El t¨¦cnico no debe decir 'haz esto, eso y aquello' sino 'hay que hacer esto juntos'. Nosotros no les damos cosas. Les decimos lo que deben buscar.
P. ?Deja libertad a los jugadores sobre el terreno?
R. Existen reglas. Pero, desde el momento en que las respetan, los jugadores son libres. La primera dice que para que gocen de libertad deben aceptar ciertas contrapartidas. La libertad en s¨ª misma no funciona. Si cada uno hace lo que le viene en gana cuando quiere, no funciona. Los jugadores deben concederse la libertad los unos a los otros, permit¨ªrsela. Es decir, para que un jugador ose una acci¨®n determinada sus compa?eros deben pensar para ¨¦l, trabajar para ¨¦l.
P. ?C¨®mo motiva a sus futbolistas?
R. Hay que proponerles retos interesantes. La motivaci¨®n est¨¢ en el movimiento, t¨¦rminos que comparten ra¨ªz. Cuando se est¨¢ motivado, uno se mueve.
P. La Real juega al l¨ªmite, lo que le hace atractiva.
R. Es la opci¨®n que hemos elegido y debemos mantenerla porque motiva a los jugadores. Partidos como el del Betis son espectaculares para el p¨²blico y para los jugadores. El placer m¨¢s grande del deportista es superarse, sobreponerse a la adversidad por s¨ª mismo y por la afici¨®n.
P. ?D¨®nde para la improvisaci¨®n sobre el c¨¦sped?
R. La improvisaci¨®n s¨®lo les sirve a los que han trabajado mucho, a los que saben mucho.
P. Y a los que tienen mucho talento.
R. Lo importante es que los jugadores de talento sepan cu¨¢ndo conviene improvisar y no se equivoquen. Los buenos jugadores son los que respetan el juego.
P. La Liga tiene muchos partidos infames. ?Es por culpa de los jugadores o de los entrenadores?
R. Es culpa de los progresos que conoce el f¨²tbol. Cada vez hay menos diferencias de calidad entre los equipos, lo que bloquea muchos partidos. Los entrenadores apreciamos esta realidad, pero no es espectacular. Cuando se marcan muchos goles es porque se han dado muchos errores, lo que no nos gusta a los t¨¦cnicos. Es dif¨ªcil ver partidos equilibrados y espectaculares.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.