Ella decide

En el conflicto de derechos planteado en el caso de la adolescente de 15 a?os embarazada que no ha querido abortar prima la libertad de la joven a decidir sobre su maternidad. El juez que ha amparado ese derecho, en contra de la opini¨®n de los padres de que lo mejor para su hija era el aborto, ha actuado de acuerdo con la ley. No importa que la adolescente sea menor de edad. La patria potestad queda supeditada al libre consentimiento de la joven embarazada y al respeto de su intimidad. Adem¨¢s, el hecho de que el embarazo fuera deseado, aunque prematuro en una adolescente de 15 a?os, imped¨ªa a los padres el posibre recurso al aborto legal, alegando un nada improbable riesgo para la salud ps¨ªquica de su hija, en pleno desarrollo de su personalidad.

Pero la soluci¨®n dada a este caso, legalmente inobjetable, pone en evidencia tambi¨¦n las lagunas y carencias existentes en el tema del aborto. Si la libre decisi¨®n de la menor embarazada prima sobre la de los padres en caso de no querer abortar, ?por qu¨¦ la ley invierte los t¨¦rminos y exige el consentimiento paterno si la joven quiere abortar acogi¨¦ndose a alguno de los supuestos legales?

Los embarazos entre adolescentes, en su mayor parte no deseados, no s¨®lo ponen en entredicho las pol¨ªticas de prevenci¨®n y educaci¨®n sexual, sino el actual marco legal del aborto. El n¨²mero creciente de chicas embarazadas de entre 15 y 19 a?os evidencia la irresponsabilidad de quienes obstaculizan campa?as p¨²blicas a favor del uso del preservativo, y la imposibilidad de que muchos de estos embarazos no deseados puedan ser interrumpidos legalmente conduce a abortos clandestinos, con el consiguiente riesgo jur¨ªdico y sanitario. Con una pol¨ªtica de planificaci¨®n familiar m¨¢s afinada y una legislaci¨®n m¨¢s amplia, podr¨ªan evitarse no pocos dramas personales y familiares en un sector de la poblaci¨®n que por raz¨®n de edad est¨¢ todav¨ªa lejos del ejercicio responsable de la paternidad.