?Re-conocidos?

En el test de Rorschach las im¨¢genes difieren seg¨²n el cerebro que las procese. Algunas personas ven estampadas mariposas otras oscuros murci¨¦lagos. Hablamos de la capacidad humana para transformar la realidad a sus deseos o necesidades inmediatas. En la acci¨®n pol¨ªtica la interpretaci¨®n es sumamente variada, pero esto no significa que el negro sea blanco.

La lectura que el Gobierno de Navarra ha hecho de la exigencia normativa de que siete vocales del Consejo Navarro del Euskera sean nombrados entre personas de reconocido prestigio en el ¨¢mbito del euskara y la cultura vasca es de psiqui¨¢trico. Bien es cierto que el decreto de creaci¨®n del Consejo, usa un lenguaje vago y susceptible de interpretaci¨®n. Pero entender que el conocimiento del vascuence, el ser profesor universitario o el haber sido presidente del Parlamento de Navarra son criterios suficientes, es una salida de madre. De entre los siete vocales nombrados por el Gobierno no dudamos de que todos son personas, algunos son reconocidos, alguien tiene prestigio y varios saben euskara. Pero ninguno de ellos son 'personas de reconocido prestigio en el ¨¢mbito del euskara'. Y eso es lo que el decreto exige.

A su vez, la rapidez con la que Sanz ha dado puerta a la formaci¨®n del Consejo de Navarra es s¨®lo comparable a la santificaci¨®n del beato Balaguer. No han esperado siquiera a que Euskaltzaindia nombrara a su vocal non nato y esto, cuando menos, es una groser¨ªa. Renovar el Consejo de Navarra s¨®lo para cumplimentar los tr¨¢mites que el Tribunal Superior de Justicia exigi¨® y exige al Gobierno de UPN es actuar en fraude. Copar ese ¨®rgano con miembros del Gobierno y afines es negar la idea misma del Consejo, un foro de encuentro, participaci¨®n y di¨¢logo entre la Administraci¨®n y la sociedad navarra. La forma y el fondo en todo este nuevo proceso de renovaci¨®n del Consejo no permite augurar un trabajo serio en favor de la normalizaci¨®n ling¨¹¨ªstica del euskara a trav¨¦s de un ¨®rgano independiente. El Gobierno de Navarra ve en el Consejo un simple instrumento, un tr¨¢mite a cumplimentar por exigencia judicial para poder tener nuevamente en el mercado su producto estrella. Un renovado Decreto Foral 372. Otros vemos en el Consejo un foro donde han de correr paralelamente la implicaci¨®n y participaci¨®n de aquellos organismos, instituciones y personas que representan a los distintos sectores que act¨²an a favor del euskara. DF 689/1996 dixit.

La obcecaci¨®n que demuestra este Gobierno en controlar y acotar el uso social del euskara como si de un virus contaminante se tratase es de tribunal internacional. UPN ve al euskara como un enemigo a derrotar; ni respeta la identidad de Navarra ni su historia. Regula en su contra y se salta la legalidad.-