Crece el descontento en el Poblenou por la forma en que se implanta el 22@
Los afectados califican de 'expeditivos' los m¨¦todos para la transformaci¨®n del barrio
Arrecian las protestas vecinales en el Poblenou por la forma en que se implanta en el barrio el 22@. La semana pasada el pleno del distrito de Sant Mart¨ª, que deb¨ªa ratificar el plan del Eix Llacuna, result¨® m¨¢s accidentado de lo que cab¨ªa esperar trat¨¢ndose de un proyecto consensuado con la Asociaci¨®n de Vecinos del Poblenou. A ello se une el malestar y descontento que reina entre los peque?os propietarios del barrio, que se quejan de que las grandes inmobiliarias pagan muy poco por sus viviendas, ubicadas en una zona con grandes expectativas de negocio, de la especulaci¨®n y de que las empresas les niegan informaci¨®n.
En el pleno de la semana pasada, una cincuentena de vecinos hicieron o¨ªr sus airadas protestas ante los consejeros de distritro, y eso que el acuerdo alcanzado en marzo permiti¨® rebajar la altura de las nueve torres que inicialmente iban a tener 72 metros, como las de la calle de Tarragona, para dejarlas en seis de 48 metros. Tambi¨¦n se recort¨® entre el 15% y el 20% el n¨²mero de fincas afectadas por el proyecto.
El pleno fue un indicio m¨¢s del descontento reinante entre distintos sectores del barrio por c¨®mo se est¨¢n gestionando algunos de los seis planes que forman parte del 22@, un proyecto para convertir parte del Poblenou en una zona de implantaci¨®n de empresas de la denominada nueva econom¨ªa.
Al principio cada grupo vecinal iba por libre, pero ¨²ltimamente empiezan a unirse para luchar contra la especulaci¨®n que sufre el barrio. Los primeros en dar la voz de alarma fueron una veintena de propietarios afectados por el Plan de Reforma Interior de Llevant. Estos vecinos crearon una asociaci¨®n contraria a los m¨¦todos, que tachan de 'demasiado expeditivos', tanto de la sociedad p¨²blica 22@bcn como de empresas privadas, entre las que figura Promino, propiedad de La Caixa. Las discrepancias afectan tambi¨¦n a la valoraci¨®n que las empresas promotores hacen de sus fincas -por una vivienda de 130 metros cuadrados en una zona emergente de fuertes expectativas de negocio les ofrec¨ªan 90.151 euros, unos 15 millones de pesetas- y a los modos: algunos propietarios se enteraron hace dos veranos por boca de un empleado de la inmobiliaria que les visit¨® de que en diciembre su casa ya no existir¨ªa.
Aportaci¨®n vecinal
Diversos grupos de afectados se organizaron por su cuenta y otros, como el grupo de Llevant, contrataron los servicios de un bufete de abogados y han lograron congelar la ejecuci¨®n del plan, que en su caso era inminente, pero llevan negociando con el Ayuntamiento sin resultado satisfactorio hasta el momento.
El presidente de la Asociaci¨®n de Vecinos del Poblenou, Salvador Clar¨®s, sigue defendiendo el acuerdo alcanzado sobre el Eix Llacuna porque no en vano se introdujeron mejoras gracias a las aportaciones vecinales. Entre estas ventajas, Clar¨®s destaca que se redujera el n¨²mero de fincas afectadas y se abrieran canales de participaci¨®n para que la entidad pueda hacer el seguimiento del acuerdo. La entidad vecinal considera 'leg¨ªtimas' las aspiraciones de los particulares que pretenden que se valoren sus propiedades lo mejor posible, pero no las apoya.
El concejal del distrito, el socialista Francesc Narv¨¢ez, resta importancia a las protestas porque considera que los afectados del 22@ salen ganando. De los 28 afectados del Eix Llacuna, s¨®lo cuatro son propietarios, y los restantes, inquilinos. A ¨¦stos se les realoja en pisos protegidos, de forma que casi por lo que pagan de alquiler tendr¨¢n un piso en propiedad. A los propietarios se les reconocen tres tipos de derechos: tendr¨¢n opci¨®n a los beneficios del 22@ en funci¨®n de los metros cuadrados de su finca, se les compensar¨¢ por el valor de su propiedad y tendr¨¢n derecho a ser alojados en un piso protegido valorada en 35.000 euros. El edil se?ala que incluso les han ido a protestar personas por no estar afectadas por los planes.
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