Los hosteleros rechazan la campa?a de horarios porque "el problema est¨¢ en la calle"
Achacan los problemas a las "conductas inc¨ªvicas"
Los hosteleros vascos rechazan de plano la campa?a puesta en marcha por el Gobierno para controlar el horario de los bares al considerar que el 'problema est¨¢ en la calle y no en los establecimientos'. Argumentan que los problemas de ruidos en la calle, que llevaron al Ejecutivo a impulsar la campa?a publicitaria, son responsabilidad de la Administraci¨®n. 'En modo alguno compartimos que el ¨²nico culpable de la perturbaci¨®n del descanso es la hosteler¨ªa', se?alan.
Las tres federaciones de hosteler¨ªa del Pa¨ªs Vasco, que suman casi 17.000 establecimientos, explicaron ayer en Bilbao su rechazo a la campa?a Todo tiene su tiempo, iniciada esta semana. En ella se incide en la importancia de cumplir el decreto de horario de bares, aprobado en 1997, las molestias que genera la diversi¨®n hasta altas horas y la p¨¦rdida de calidad de vida de los vecinos de zonas saturadas de establecimientos.
El Gobierno admite que la norma que regula el cierre no se sigue mayoritariamente, aunque los hosteleros reducen a un 3 o 4% el porcentaje de bares que la incumplen. El Ejecutivo vasco ha clausurado este a?o seis locales por este motivo y analiza otras 50 denuncias.
Los responsables de las tres federaciones, que calificaron de 'imperativo' el respeto al horario de cierre, creen innecesaria una campa?a para cumplir una ley. Adem¨¢s discrepan de sus principales mensajes porque las quejas vecinales por los ruidos no se deben, a su juicio, a los horarios, sino 'a conductas inc¨ªvicas en la calle'. 'Con unas calles pac¨ªficas, sin orines, cascos rotos, gritos, el sector podr¨ªa incluso solicitar horarios algo m¨¢s amplios', afirm¨® el secretario general de la federaci¨®n, ?ngel Gago.
'Inoperancia' municipal
Argument¨® que tanto los vecinos como los hosteleros son 'v¨ªctimas' de estos alborotos y que el 80% de la contaminaci¨®n ac¨²stica procede del exterior de los bares. 'No podemos continuar soportando la inoperancia de los ayuntamientos para controlar estas concentraciones cargando contra el hostelero', explican. Por ello creen que la campa?a elude este problema y la Administraci¨®n comete 'un grave error de an¨¢lisis al criminalizar gen¨¦ricamente a los establecimientos'.
Para ello, los hosteleros proponen otras medidas, que han trasladado a instituciones y entidades como Eudel, para proteger los derechos vecinales como 'el control de actividades desleales e ilegales [de hosteler¨ªa], control de horario en actos festivos, vigilancia de comportamientos en el exterior de los establecimientos, iniciativas legislativas que impongan los derechos de la sociedad a tener unas calles pac¨ªficas'.
El director de Juego y Espect¨¢culos, Alberto Sanz, mostr¨® su 'respeto' a la postura de los hosteleros de no secundar la campa?a, a la que fueron invitados como el resto de agentes implicados. Precis¨® que en 'determinados locales y zonas' se incumplen los horarios de cierre, lo que provoca 'que haya m¨¢s gente y eso genera terribles molestias a los vecinos'.
Sanz agreg¨® que el cumplimiento estricto de la normativa 'supondr¨¢ una disminuci¨®n important¨ªsima de las grandes molestias de los vecinos'.
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