Javier Reverte cierra su trilog¨ªa sobre ?frica con un rico retrato de su gente

Habla del continente africano, de sus paisajes y sus gentes, y se emociona. Javier Reverte (Madrid, 1944) regresa a la literatura de viajes con Los caminos perdidos de ?frica (Aret¨¦). El lector recorre con el escritor sus tres meses pasados en Sud¨¢n, Etiop¨ªa y Egipto, y descubre a sus habitantes, escucha sus voces y huele sus perfumes. Reverte cierra as¨ª la trilog¨ªa que comenz¨® con El sue?o de ?frica (1996) y Vagabundo en ?frica (1998).

Reverte descubri¨® el continente negro en 1992 casi de casualidad y despu¨¦s de ese primer viaje decidi¨® escribir El sue?o de ?frica, que fue rechazado por varias editoriales antes de conseguir que se publicara. Est¨¢ convencido de que sus libros interesan al lector por ser el continente que menos se parece a Europa y por sus pinceladas de lirismo y romanticismo. 'All¨ª est¨¢ la potencia del futuro, la esperanza y el fracaso de la humanidad', comenta.

Reverte asegura que para ¨¦l ese continente es un vicio que te obliga a volver una y otra vez. 'Me he acercado a lugares casi ignorados y desconocidos, cuyo peligro no es la violencia, sino la burocracia', afirm¨® durante la presentaci¨®n de su ¨²ltimo libro en Madrid.

De Etiop¨ªa dijo que es 'un pa¨ªs perdido en s¨ª mismo. Es un islote del cristianismo copto, con lengua propia y escondido desde el siglo XIV. Es poco probable que abandone la situaci¨®n en la que se encuentra, porque todav¨ªa es capaz de creerse sus propias leyendas'. Muy diferente a Sud¨¢n, 'un pa¨ªs creado en la ¨¦poca colonial, con dos zonas completamente delimitadas, una de las cuales, selv¨¢tica y habitada por negros, est¨¢ en guerra desde hace 20 a?os, ha perdido su identidad y es completamente diferente a la otra, des¨¦rtica, musulmana y fundamentalista'. El autor dice que ha podido constatar en su periplo que las diferencias entre el norte y el sur de este pa¨ªs son tan marcadas que los sudaneses desconocen qu¨¦ son: 'No saben si son sudaneses o egipcios, aunque lo que son de verdad es hospitalarios'. La ¨²ltima parte de Los caminos perdidos de ?frica se la dedica a Egipto, 'sin hablar de faraones'.

Javier Reverte cree que Los caminos perdidos de ?frica es, sobre todo, 'un libro de camino. Soy muy mal viajero, me pierdo siempre y todo me sale al rev¨¦s de lo planificado. Ello me ha permitido poder describir situaciones de gran comicidad'. El escritor recuerda que empez¨® solo el viaje y acab¨® en compa?¨ªa: 'Me encontr¨¦ muchas personas de las que siempre aprendes. ?frica es dura y dif¨ªcil, pero apasionante'.

Este libro contiene, seg¨²n su autor, aventura, riesgo, emoci¨®n, cultura y vida. De los pa¨ªses que ha recorrido por el continente africano se quedar¨ªa con Tanzania, por la simpat¨ªa de sus habitantes y porque es 'un pa¨ªs tranquilo para los extranjeros'. De momento, y por un largo periodo de tiempo, Javier Reverte no podr¨¢ volver a visitar a los amigos que dej¨® en los caminos de ?frica: todav¨ªa est¨¢ recuper¨¢ndose de la malaria que contrajo en ese viaje.