A falta de equipo, 'Puyol y diez m¨¢s'

Vuelven Dutruel y Abelardo al Camp Nou, ahora en el Alav¨¦s, y con su regreso se reabre en el Barcelona un debate que el club no logra cerrar desde que se jubil¨® Migueli. Louis van Gaal acaba de cambiar de portero -Bonano ser¨¢ hoy titular-, a De Boer le silban los o¨ªdos casi tanto como en su d¨ªa a Bogarde y, puestos a encomendarse a alguien, Puyol parece por el griter¨ªo que suma m¨¢s que lo que daban Ferrer y Sergi juntos, aunque Joan Gaspart, el presidente, no sabe c¨®mo renovarle el contrato, de manera que cada partido se convierte en un homenaje al internacional.

Puestos a no tener defensa, ya sea de tres o cuatro hombres, Puyol vale por todos: por los centrales y los laterales. As¨ª que no es de extra?ar que el entrenador haya dicho que no va a fichar a ning¨²n nuevo central, sino que procurar¨¢ que salga un cl¨®nico del Sans¨®n del primer equipo: Tortolero y Oleguer, del filial, como era Navarro, se presentan como las alternativas para cubrir las bajas por lesi¨®n de Reiziger, Andersson y Christanval.

Acostumbrado desde la ¨¦poca de Johan Cruyff a decidir los partidos por la mayor diferencia de goles a favor, el Bar?a ha perdido la costumbre de evitarlos. Popescu, Couto, Blanc, Bogarde, Pellegrino y D¨¦hu se presentaron y se largaron sin saber a qu¨¦ hab¨ªan venido y con Christanval puede pasar algo parecido mientras que Andersson es v¨ªctima de la fatalidad. No encuentra remedio el equipo a su sangr¨ªa defensiva, reflejada en De Boer, contratado del Ajax (1998-99) a golpe de talonario para combatir la a?oranza de Koeman, quien, tal y como van las cosas, igual llega a tiempo de entrenar al propio De Boer en el Bar?a.

Los defensas m¨¢s ilustres no han logrado marcar la raya defensiva del Barcelona, circunstancia que remite el asunto a un problema de concepto de juego y no tanto de invididualidades. M¨¢s que un sistema, a Cruyff le vali¨® tener a dos marcadores y poner a los otros ocho jugadores por delante de la pelota. Van Gaal procura imitarle, m¨¢s o menos, pero no le sale y Bobby Robson se rindi¨® en cuanto le ri?eron por situar a Popescu en el doble pivote en vez de a De la Pe?a para que tirara de las riendas de un plantel desbocado por Ronaldo. Ocurre que el Bar?a se olvid¨® de defenderse desde los tiempos de C¨¦sar Luis Menotti, que achicaba los espacios, y de Terry Venables, ¨¦poca en que los automatismos de la zaga eran tales que la l¨ªnea del fuera de juego se tiraba un metro m¨¢s adelante o m¨¢s atr¨¢s en funci¨®n de la severidad de los linieres.

A falta de defensa y de ataque, en busca de una alineaci¨®n, Van Gaal anunci¨® ayer que hoy jugar¨¢n 'Puyol y diez m¨¢s'.