Una casa en el aire

Si las fotograf¨ªas ofrecen una buena referencia de la casa, la visita a Urretxu confirma las expectativas. Victoria Acebo (Ponferrada, Le¨®n, 1969) y ?ngel Alonso (Santander, 1966), dos j¨®venes arquitectos afincados en Madrid, han intervenido en la nueva urbanizaci¨®n de chalets de la localidad guipuzcoana con una caja gris para dos familias que mira a su interior, mientras que el exterior es reflejo de la propia Urretxu. Adem¨¢s es una intervenci¨®n decidida en el paisaje urbano.

A pesar de la ubicaci¨®n te¨®ricamente perif¨¦rica, el edificio ha sido reconocido, junto a otras nueve construcciones de toda Espa?a, en la ¨²ltima edici¨®n de la Muestra de J¨®venes Arquitectos Espa?oles, organizada por la Fundaci¨®n Camu?as. Y no es para menos: aunque s¨®lo sea para reivindicar el riesgo. Victoria Acebo y ?ngel Alonso proyectaron una vivienda en una urbanizaci¨®n marcada por las construcciones pintorescas con aire de caser¨ªo.

El encargo lleg¨® de dos matrimonios que hab¨ªan seguido la obra de este estudio madrile?o. Es decir que lo ten¨ªan claro: su vivienda no se iba a parecer en nada al resto. Nada m¨¢s desplazarse a Urretxu, los arquitectos se encontraron con un solar casi imposible, sobre todo para quien ejerce su labor en la meseta.

Es una parcela en ladera, con lo que la casa ten¨ªa que elevarse 12 metros, por encima de su apoyo, para conseguir la cota que exig¨ªa la normativa municipal. 'As¨ª que desde el principio estaba la idea de construcci¨®n ligera, con una estructura que diera la sensaci¨®n de lo que iba a construirse: una casa en el aire', recuerda Victoria Acebo.

Esa sensaci¨®n marca toda esta urbanizaci¨®n en hilera, situada sobre el centro de Urretxu, por encima de los tejados de las casas m¨¢s pr¨®ximas. Pero s¨®lo las Casas M.U. (como fueron bautizadas a partir de los apellidos de sus propietarios) consiguen reflejar esa sensaci¨®n de ingravidez. Como recuerdan ellos mismos: 'En esta ocasi¨®n, nuestro objetivo era la elevaci¨®n'.

Adem¨¢s, los arquitectos quer¨ªan registrar la vinculaci¨®n con el paisaje industrial de toda Guip¨²zcoa, marcado por la siderurgia. De ah¨ª que se optara por utilizar el forjado y el acero como presupuestos b¨¢sicos en la construcci¨®n. Victoria Acebo recuerda la reacci¨®n de las empresas contratadas: 'Cuando se enteraban de que hab¨ªa que levantar una vivienda, nos dec¨ªan que ellos s¨®lo sab¨ªan hacer naves'.

Las casas M.U. son una caja compacta abierta en su interior con un gran patio que sustituye al cl¨¢sico jard¨ªn de viviendas en hilera. En el exterior, optaron por el uso del vidrio como complemento del forjado, con el fin de que el volumen pareciera que flotaba en la luz, reflej¨¢ndola. Esa combinaci¨®n de materiales, in¨¦dita en el entorno, remata la singularidad del edificio.

Todo ello desde los presupuestos que caracterizan a este estudio cuando trabaja en el campo de la vivienda. 'Buscamos soluciones generales que permitan avanzar en la definici¨®n de mejores viviendas, m¨¢s sencillas en su formalizaci¨®n y su construcci¨®n, pero m¨¢s ricas en cuanto a las experiencias espaciales', comenta ?ngel Alonso.

Es decir, que la mayor inversi¨®n que realiza una familia en su vida ofrezca un h¨¢bitat marcado por el soleamiento, la ventilaci¨®n y la distribuci¨®n abierta.