Sobre el agua
Guillermo Aymerich (Santiago de Compostela, 1964) es uno de los artistas gallegos que vive a mitad de camino entre la generaci¨®n que se integr¨® en el movimiento Atl¨¢ntica y de los nuevos valores. La Fundaci¨®n Laxeiro de Vigo ofrece la oportunidad de acercarse a su obra en la muestra Aproximaci¨®n al agua que presenta series realizadas en los ¨²ltimos ocho a?os.
La trayectoria vital del artista est¨¢ presente en su obra -inspirada en paisajes tan distintos como los de Nueva York,Vigo o Cabo de Gata-, pero lejos de tener un contenido autobiogr¨¢fico, sus series est¨¢n concebidas como minuciosas investigaciones de un paisaje o de s¨ªmbolos y motivos de los lugares visitados por Aymerich. Lo importante no es la descripci¨®n de lo que se ve, sino las m¨²ltiples formas en que puede ser visto, en funci¨®n de la luz o los colores a los que recurre el artista. El agua es el elemento aglutinante de todas las seriesLos soportes y t¨¦cnicas empleados en las obras expuestas son variados, pero lo que distingue al artista gallego es la fusi¨®n entre pintura y fotograf¨ªa.
APROXIMACI?N AL AGUA
Guillermo Aymerich Fundaci¨®n Laxeiro Policarpo Sanz, 15, 3?. Vigo Hasta el 15 de diciembre
As¨ª, explora todas las posibilidades imaginables para unir ambas disciplinas con resultados que dejan al espectador con la sensaci¨®n de que est¨¢ viendo obras concebidas por distintas personas. No hay una conexi¨®n aparente entre las fotograf¨ªas retocadas de la serie A flor de piel y los ¨®leos de Paletas de color. El elemento com¨²n es que la mirada es la de un pintor.
En una de sus ¨²ltimas series, Colores al agua, Aymerich pinta los paisajes que ve desde su vivienda situada sobre la r¨ªa de Vigo. Los barcos cambian de color y la luz los convierte en objetos n¨ªtidos o en apariciones fantasmag¨®ricas.
Cada uno de los cuadros no debe tomarse aisladamente, forma parte de un conjunto en el que dialoga y cobra todo su sentido. Las obras no pueden entenderse recurriendo s¨®lo al lenguaje visual, ya que hay todo un c¨®digo ling¨¹¨ªstico que subyace en las mismas, adem¨¢s del hilo invisible que conecta a las distintas series. Es como un r¨ªo subterr¨¢neo que no podemos ver pero que alimenta las distintas facetas de la obra de Aymerich.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.