Condenado a 30 a?os de c¨¢rcel el asesino de la joven Virginia Acebes
La sentencia le obliga a pagar 120.000 euros a los padres de la v¨ªctima
La Audiencia de Bilbao ha condenado a 30 a?os de prisi¨®n a Luis Gabriel Mu?oz, de 26 a?os, por el asesinato, con alevos¨ªa y ensa?amiento, de la joven Virginia Acebes, de 19 a?os, cometido el 21 de noviembre de 1999 en el monte Artxanda de Bilbao. La sentencia, de la que ha sido ponente la magistrada Ana Bel¨¦n Iracheta, obliga al autor del crimen a pagar una indemnizaci¨®n de 120.000 euros a los padres de la estudiante y le proh¨ªbe acercarse a su familia durante cinco a?os a partir del cumplimiento de la pena.
Mu?oz no podr¨¢ gozar de permisos carcelarios hasta que pase un m¨ªnimo de 15 a?os en la c¨¢rcel. El condenado cumple actualmente una condena de tres a?os por un intento de violaci¨®n en fechas posteriores al crimen de Acebes. El abogado de la familia, Jos¨¦ Ricardo Palacio, se felicit¨® de la sentencia y asegur¨® que responde a su petici¨®n en el juicio para que fuera ejemplar. La presidenta de la asociaci¨®n Clara Campoamor, Blanca Estrella, que ejerci¨® la acusaci¨®n popular, mostr¨® su desacuerdo porque el condenado pueda salir de prisi¨®n cuando cumpla la mitad de la pena.
El fallo, de 22 folios, considera probado que Mu?oz eligi¨® a Virginia Acebes al azar cuando la joven, estudiante de segundo curso de Econ¨®micas, volv¨ªa a su casa en la madrugada del 21 de noviembre por la calle Santutxu. El agresor abord¨® a la joven y, amenaz¨¢ndola con un cuchillo de cocina de 14 cent¨ªmetros de longitud, le oblig¨® a introducirse en su coche, un Volkswagen Polo, y la traslad¨® a un lugar apartado del monte Artxanda. All¨ª, tras violarla, le dio un tajo en el cuello y, crey¨¦ndola muerta, se alej¨®. Sin embargo, al observar que todav¨ªa se mov¨ªa, Mu?oz regres¨®, sujet¨® a la v¨ªctima del cuello y le propin¨® tres pu?etazos en la cara y 51 cuchilladas. Despu¨¦s abandon¨® el lugar y fue arrojando algunas pertenencias de su v¨ªctima por el camino. La chica en ning¨²n momento opuso resistencia por estar atemorizada. Su cad¨¢ver fue hallado por un t¨ªo suyo la tarde del d¨ªa 22.
El fallo no alberga dudas de que el procesado fue el autor del crimen, a pesar de que tras sus dos primeras confesiones ante la Ertzaintza y el juzgado se retract¨® posteriormente argumentado malos tratos policiales, lo que mantuvo durante la vista oral. El tribunal desestima las explicaciones ofrecidas por el procesado para justificar el cambio de testimonio y resalta que "la mayor parte de los datos que aport¨® en su primera declaraci¨®n judicial y en la policial que le precedi¨® no eran conocidos por nadie". Adem¨¢s resalta el valor incriminatorio de las "pruebas objetivas" que le vinculan al crimen. Es el caso de la coincidencia del ADN del acusado con los restos de semen encontrados en el cad¨¢ver de la joven. En su ropa tambi¨¦n se hallaron pelos de perro id¨¦nticos a los encontrados en el coche de Mu?oz. El fallo tiene tambi¨¦n en cuenta la "compatibilidad" entre el relato de los hechos realizado por el acusado y los datos que revel¨® la autopsia sobre los ¨®rganos afectados por las cuchilladas y la localizaci¨®n de las heridas.
El tribunal rechaza la petici¨®n de la defensa de que se aplique al asesino la atenuante de alteraciones ps¨ªquicas, al considerar que, si bien se le han detectado "ciertos rasgos esquizoides y paranoides", "tiene una inteligencia normal" y era plenamente consciente de la naturaleza de sus acciones.
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