La empresa contratada para salvar el 'Prestige' critica la orden de llevar el barco a alta mar
La compa?¨ªa Smit International fue la que rescat¨® el submarino nuclear ruso 'Kursk'
La divisi¨®n de salvamento de la empresa Smit International, con base en Holanda, encargada de intentar salvar el petrolero Prestige, hundido el martes frente a las costas portuguesas, es la misma que se encarg¨® de la ingente tarea de recuperar el a?o pasado (continuando con una segunda fase este a?o) el submarino nuclear ruso Kursk, hundido en 2000 con una tripulaci¨®n de 118 personas tras la explosi¨®n de un torpedo a bordo. Esta empresa holandesa es l¨ªder en su campo, que comprende no s¨®lo el salvamento de buques en apuros sino tambi¨¦n, entre otras ¨¢reas, el transporte y montaje de grandes estructuras en el mar.
Este mismo a?o se encarg¨® de transportar de C¨¢diz a M¨®naco un gigantesco dique -el mayor dique flotante del mundo- fabricado en Espa?a para el puerto del principado. En su ya larga historia ha participado en el salvamento de numerosos barcos, entre ellos los espa?oles Ciudad de Sevilla -hundido en Palma de Mallorca en 1982- y el Castillo de Salas -frente a Gij¨®n, en 1986-.
"El Gobierno nos orden¨® ir a aguas profundas, y el fuel se extendi¨® mucho"
Smit Salvage, junto a su socio espa?ol Technosub, fue contratada por el armador del Prestige el 14 de noviembre, al d¨ªa siguiente de que el barco fuera abandonado a su suerte, tras abrirse una v¨ªa de agua. Ayer, su portavoz, Lars Walder, critic¨® en declaraciones a medios brit¨¢nicos las ¨®rdenes del Gobierno espa?ol, destinadas a alejar el barco de la costa coru?esa y mantenerlo luego en mar abierto, y relacion¨® estas decisiones con que el barco se partiera finalmente en dos. "El da?o estructural no mejor¨® desde luego durante los cinco d¨ªas de remolque en aguas muy agitadas", dijo, aunque a?adi¨® que entend¨ªa que se trataba de decisiones pol¨ªticas m¨¢s que cient¨ªficas.
Seg¨²n Walder, cuando fueron contratados, se trataba de evitar que el barco embarrancara en la costa espa?ola. "Lo que hubi¨¦ramos preferido entonces era buscar refugio en una bah¨ªa y bombear ah¨ª el fuel a otro barco. Habr¨ªa habido contaminaci¨®n, pero m¨¢s o menos controlada porque se trata de un ¨¢rea peque?a. Como el Gobierno espa?ol nos orden¨® ir a aguas profundas, el fuel se extendi¨® a lo largo de una enorme ¨¢rea costera". No es la primera vez que los rescatadores y los Gobiernos no se entienden, a juzgar por lo que la empresa afirma en su informaci¨®n en Internet: "El salvamento es la primera l¨ªnea de defensa frente a la contaminaci¨®n mar¨ªtima en caso de accidente grave".
Tambi¨¦n anuncia Smit Salvage, y record¨® Walders ayer, la disponibilidad de un m¨¦todo de recuperaci¨®n de productos qu¨ªmicas o de petr¨®leo en barcos hundidos hasta 250 metros de profundidad. Este m¨¦todo pretenden ampliarlo hasta los 2.500 metros en el futuro, lo que no servir¨ªa para el caso del Prestige, hundido a m¨¢s de 3.500 metros de profundidad.
El caso del Kursk fue muy distinto. Estaba a s¨®lo 100 metros de profundidad, aunque en las g¨¦lidas aguas del Mar de Barents. Adem¨¢s, era un submarino moderno, grande y muy pesado, con reactores nucleares y decenas de torpedos con carga explosiva, que hab¨ªa que tratar con sumo cuidado para evitar explosiones y contaminaci¨®n radiactiva. Entonces se utilizaron buzos para cortar con una sierra especial la proa del submarino, da?ada y hundida en el fango, y luego se montaron los anclajes necesarios para que fuera izado el casco, mediante 26 gatos hidr¨¢ulicos controlados por ordenador, por una gabarra elevadora de la empresa Mammoet, tambi¨¦n holandesa, amarrada a ocho puntos de anclaje.
La operaci¨®n fue un ¨¦xito y el Kursk, con unos 100 muertos a bordo, fue remolcado suspendido bajo la gabarra hasta el puerto de Rosliakovo, donde lleg¨® el 10 de octubre de 2001.
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