La socialista Jim¨¦nez promete cerrar la Casa de Campo al tr¨¢fico si llega a la alcald¨ªa
El segundo d¨ªa del 'trinimarat¨®n' transcurri¨® entre ecologistas, bomberos y comerciantes
Trinidad Jim¨¦nez, aspirante socialista a la alcald¨ªa, vivi¨® ayer la segunda jornada del trinimarat¨®n (una semana en la que la candidata asistir¨¢ a m¨¢s de setenta actos), con menos de seis horas de sue?o en el cuerpo y una agenda demasiado apretada para poder centrarse en alg¨²n colectivo en concreto. Despu¨¦s de ver a los bomberos, a los que hac¨ªan cola para obtener un piso de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV) y una escuela infantil, los ecologistas le arrancaron la ¨²nica promesa electoral que ha hecho en dos d¨ªas: que cerrar¨¢ la Casa de Campo al tr¨¢fico privado.
La alcaldable almorz¨® con varios grupos ecologistas y con Cristina Narbona, responsable socialista de Medio Ambiente. ?stos lograron obtener, s¨®lo tras las insistentes preguntas de un periodista, la primera promesa electoral de estos dos d¨ªas: "S¨ª, asumo el compromiso de cerrar al tr¨¢fico privado la Casa de Campo. Estar¨¢ en nuestro programa electoral". La candidata propuso alternativas para cuidar el entorno del parque, que s¨®lo pis¨® para almorzar, como el fomento del transporte p¨²blico e implantar el tranv¨ªa y los trenes el¨¦ctricos. Pero no hizo ninguna referencia a la situaci¨®n de las numerosas meretrices que ejercen la prostituci¨®n en la Casa de Campo.
La segunda jornada del trinimarat¨®n comenz¨® algo pasadas las 8.30. La caravana, compuesta de tres veh¨ªculos forrados con la imagen de la candidata a tama?o gigante en la que viajaban periodistas, asesores, compa?eros de partido y voluntariosos miembros de Juventudes Socialistas, hizo la primera parada en el parque de bomberos del distrito de Fuencarral pasadas las 8.30 y asisti¨® al cambio de guardia. Como los escolares que visitan el cuerpo, Trinidad Jim¨¦nez recibi¨® un carn¨¦ de bombero infantil, porque se lo pas¨® como una ni?a. Se puso un casco de bombero, ayud¨® a hacer una cama, sirvi¨® chocolate a los miembros del cuerpo y se subi¨® en una escala de 50 metros con las piernas temblorosas. Los bomberos le explicaron que no est¨¢n adaptados a los nuevos tiempos, que si ocurriera una cat¨¢strofe en Madrid, no estar¨ªan preparados para resolverla. Jim¨¦nez, comprensiva, asent¨ªa con la cabeza y sonre¨ªa.
Tambi¨¦n disfrut¨® con la visita a la ermita de San Antonio de la Florida. Los restauradores y la conservadora de la capilla le explicaron el proceso de restauraci¨®n de los frescos de Francisco de Goya. En la calle, dos polic¨ªas motorizados, cuya intenci¨®n primera parec¨ªa ser multar a los coches del trinimarat¨®n, pidieron a la candidata que se re¨²na con los sindicatos para conocer el conflicto que mantiene la Polic¨ªa Municipal con el Ayuntamiento.
En la cola
Antes de visitar la sede de Radio Nacional de Espa?a, Jim¨¦nez se sali¨® de su apretada agenda y acudi¨® a hablar con los solicitantes de un piso de la EMV, que hac¨ªan cola en la calle de Palos de la Frontera. M¨¢s de medio centenar de personas atestaban la acera y, enfrente, varias decenas esperaban su turno y se abalanzaban sobre el trabajador que les daba la vez. "?Qu¨¦ horror! ?Pobre gente!", era la reacci¨®n de la alcaldable socialista cuando ?ngela Garc¨ªa Motos, con 27 a?os, tres hijos y separada, y Ana Vargas, de 21 a?os, madre soltera de dos hijos, le contaban que viven de alquiler tres matrimonios en una casa de dos habitaciones, pero que no les han dado puntos suficientes para adquirir una vivienda municipal o que, si los ten¨ªan, ya no quedaban viviendas.
Una mujer increp¨® a Jim¨¦nez. A gritos, le reproch¨® que s¨®lo iba all¨ª a hacerse la foto, que no le preocupa d¨®nde viven esas personas. "?Ahora no vengas aqu¨ª a lucirte. Los socialistas sois iguales que los del PP. Tengo 37 a?os y s¨¦ que no hab¨¦is hecho nada cuando gobern¨¢bais. Sois unos maniqueos. Seguro que tu hija no est¨¢ esperando cola aqu¨ª!". Trinidad Jim¨¦nez s¨®lo alcanz¨® a contestar con inseguridad: "No, porque no tengo hijos".
A¨²n no hab¨ªa almorzado cuando los beb¨¦s de la escuela infantil La Caracola, en Fuencarral, dorm¨ªan. Uno de los asesores de la candidata, un guapo argentino que colabor¨® con el ex presidente argentino Fernando de la R¨²a, permanec¨ªa atento para avisar a un fot¨®grafo cada vez que Jim¨¦nez abrazaba a Andrea, una ni?a de ocho meses que sali¨® gateando de una habitaci¨®n, o cuando admiraba a los beb¨¦s durmiendo pl¨¢cidamente con m¨²sica de Enya.
Por la tarde, el tiempo se le echaba encima. Compr¨® un libro en la Gran V¨ªa, charl¨® con los comerciantes y con los trabajadores de los almacenes SEPU durante unos minutos, compr¨® suerte en Do?a Manolita -y aunque el pasado lunes dijo que no es supersticiosa, lleva dos amuletos en el bolso- y atendi¨® a los viandantes. Termin¨® la jornada en una entrega de premios en el hotel Ritz. Y hoy se unir¨¢ a su s¨¦quito, durante un rato, el secretario general del PSOE, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero.
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