El reto de la seguridad
Un a?o despu¨¦s de su llegada al poder, el presidente sigue sin controlar Afganist¨¢n
Fue un fin de semana duro, pero tampoco extraordinario: 11 muertos en el oeste de Afganist¨¢n como consecuencia de combates entre se?ores de la guerra; tres fallecidos en Kandahar por un incidente en un puesto de control de armas, mientras que un soldado estadounidense result¨® herido en un ataque con morteros contra una base en Khost, en el sureste del pa¨ªs. Un a?o despu¨¦s de la ca¨ªda de los talibanes, la violencia y la inseguridad son todav¨ªa la principal preocupaci¨®n de Afganist¨¢n, que no ha logrado acabar con sus 23 a?os de guerras interminables.
"Los combates constantes entre diferentes grupos enemigos y las d¨¦biles estructuras del Estado son nuestros principales problemas", dijo el presidente Hamid Karzai poco despu¨¦s de su llegada a Bonn para una conferencia internacional. Hace un a?o, en este mismo escenario, Karzai fue designado presidente y ahora, aunque la situaci¨®n ha mejorado, ha regresado para pedir, de nuevo, apoyo y estabilidad. "La situaci¨®n en Afganist¨¢n recuerda peligrosamente al caos que llev¨® al poder a los talibanes a mediados de los noventa", escribi¨® en The Wall Street Journal el periodista afgano Massod Farivar. "El pa¨ªs sigue en ruinas y se enfrenta al peligro real de volver a la anarqu¨ªa", agreg¨®.
Otros especialistas, en cambio, son menos tremendistas. "No creo que el caos anterior a 1995 pueda repetirse", asegura el profesor franc¨¦s Olivier Roy. "Los que hablan de una anarqu¨ªa completa se equivocan: aparte de ciertas zonas bien delimitadas, como Shindand o Mazar, el pa¨ªs es m¨¢s bien seguro".
Actualmente, hay entre 8.000 y 10.000 soldados estadounidenses desplegados, pero su misi¨®n, como ha reiterado su portavoz, el coronel Roger King, es "capturar o matar a los miembros de Al Qaeda". Una doctrina sancionada por los l¨ªderes de la OTAN, reunidos en Praga hace dos semanas: "La responsabilidad de garantizar la seguridad y la ley reside en los propios afganos", dijeron.
De la seguridad en Kabul se ocupan las tropas internacionales de la ISAF, y en el resto del pa¨ªs, como bien se?al¨® la OTAN, los propios ej¨¦rcitos irregulares de los diferentes se?ores de la guerra. Los resultados pudieron comprobarse de nuevo en la zona de Herat: 11 muertos y 2.500 desplazados. "En Afganist¨¢n hay armas por todas partes", dijo recientemente el comandante de la ISAF, el general turco Akin Zorlu. Para la mayor¨ªa de los expertos, para el Gobierno afgano, para la ISAF o para la ONU, el principal problema que sufre Afganist¨¢n es la falta de seguridad. "Si se habla con los afganos de diferentes partes del pa¨ªs, lo que quieren antes de nada es la paz tras un cuarto de siglo de guerras", dijo el portavoz de la ONU Manoel de Almeida.
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