Expropiaci¨®n privada

Los socialistas, en su ¨²ltima legislatura aprobaron una ley, en la que una empresa, pagando un justiprecio pod¨ªa comprar cualquier terreno y plantear un PAI al Ayuntamiento correspondiente sobre dichos terrenos. Los socialistas no llegaron a aplicarla nunca. El esp¨ªritu de la ley era dinamizar la econom¨ªa. Para muchos agricultores, gente mayor, inmersos en un minifundio antiecon¨®mico, era una suerte que les pagaran un buen precio por su tierra. Evidentemente no se pagaba a un escaso precio agr¨ªcola, a eso se llama expropiar. Eso ven¨ªa dado por empresas que quer¨ªan montar un pol¨ªgono industrial o una urbanizaci¨®n, con expectativas de negocio real.

Las circunstancias cambian. Resulta que fortunas valencianas, azulejeros de Castell¨®n o textiles de Onteniente, se encuentran con que sus grandes beneficios no tiene d¨®nde invertirlos. Pero alg¨²n asesor coge la LRAU, y act¨²a bas¨¢ndose en el texto, nada de esp¨ªritu:

Se busca un peque?o ayuntamiento. Si est¨¢ gobernado por independientes, y esos "pol¨ªticos independientes" est¨¢n emparentados con empresas constructoras, perfecto. Si hay que pechar con alguna "franquicia" del PP en ese ayuntamiento no importa; quiero pensar que el PP es un partido m¨¢s serio que todo eso. Se presenta el consiguiente PAI, consensuado con la "familia", en absoluto secretismo, sin haber entrado en contacto con ninguno de los propietarios. No se les pregunta si quieren el negocio, se les obliga a entrar en ¨¦l.

Se hace una reuni¨®n en los locales del Ayuntamiento, mediante una carta certificada por parte del Ayuntamiento, y resulta que esa reuni¨®n es para que la empresa urbanizadora comunique a los propietarios que la ley y el Ayuntamiento est¨¢ con ellos, que quieran o no los propietarios van a actuar sobre sus terrenos, en plan absolutamente intimidatorio y rayando el comportamiento autoritario de otra ¨¦poca.

No se queda ah¨ª la cosa. No te ofrecen ni precio, ni bueno ni malo, simplemente te dicen que una vez descontados los gastos de la urbanizaci¨®n, gastos que evidentemente todas las urbanizadoras hinchan para abaratar el valor que tendr¨ªan que pagar, se les dir¨¢ en qu¨¦ parte de parcela se convirti¨® su tierra, min¨²sculo trozo. Al ciudadano lo transforman a la fuerza de agricultor en vendedor de parcelas.

En el caso de Torreblanca, el "truco" reside, alguien pregon¨®, que todos los propietarios estaban de acuerdo con la idea del pol¨ªgono (falso), que la mayor parte del terreno sobre la que se pensaba actuar, estaba en situaci¨®n de abandono (falso), y que era el sitio id¨®neo por los accesos (falso). Empresas m¨¢s serias fueron a Torreblanca, vieron esta misma ubicaci¨®n, y la desecharon por cara para un pol¨ªgono industrial, apalabraron otra zona con visto bueno de Medio Ambiente y Carreteras, y el actual Ayuntamiento lo ignora.

?D¨®nde est¨¢ el negocio?, simplemente que la empresa urbanizadora est¨¢ interesada solamente en la parte del proyecto que es zona residencial, zona que antes era industrial, y que se recalifica como residencial. "Invierte" dinero en un macroproyecto de un pol¨ªgono industrial, sin ninguna viabilidad. Y hace lo que le interesa.

Gente hay en este asunto de Torreblanca, que se est¨¢ pagando su futura pensi¨®n como aut¨®nomo agr¨ªcola, y que se va a encontrar, fuera de su tierra, sin poder cotizar como aut¨®nomo y a diez a?os de su jubilaci¨®n.-