El ej¨¦rcito 'invade' la Puerta del Sol

El ej¨¦rcito espa?ol se despleg¨® ayer en la Puerta del Sol, donde permanecer¨¢ cuatro d¨ªas en un autob¨²s convertido en oficina m¨®vil. La misi¨®n tiene dos objetivos: reclutar 5.955 j¨®venes para el ej¨¦rcito y "extender la imagen del ej¨¦rcito profesional", seg¨²n el teniente de Ingenieros Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez Guerrero. Sin embargo, las primeras horas de presencia militar en la v¨ªa p¨²blica fueron motivo de reuni¨®n y curiosidad entre todos los que paseaban por la Puerta del Sol, ya fueran escolares en su d¨ªa de excursi¨®n, jubilados habituales del lugar o j¨®venes que pasaban por all¨ª mientras buscaban empleo.

"Me gustar¨ªa ser piloto o de la caballer¨ªa. Trabajo con mi padre en la venta ambulante, pero me gustar¨ªa hacer otra cosa". Jos¨¦ Manuel Losa, de 18 a?os, fue uno de los primeros j¨®venes que acudi¨® a informarse. Tras reunirse con uno de los cabos que informaban a los aspirantes, Losa a¨²n no lo ten¨ªa decidido: "No s¨¦, tengo que pensarlo. Es bonito, estudias y viajas, pero lo de ser militar debe ser muy esclavo".

Su opini¨®n dominaba entre los j¨®venes que entraron al punto de informaci¨®n por la ma?ana. Uno de ellos, Alison Tregarthen, de 19 a?os, estaba segura de que el ej¨¦rcito es lo suyo: "Lo tengo clar¨ªsimo. Ya lo intent¨¦ otra vez, hace un a?o. Pero fall¨¦ en las pruebas de acceso", explic¨® con ojos ilusionados ante su nueva oportunidad. Pese a su ex¨®tico nombre, Alison es de Madrid. Su madre, a su lado, asent¨ªa con la cabeza en apoyo de la vocaci¨®n militar de su hija.

Las tertulias de sobremesa en las que millones de espa?oles han contado sus peripecias de la mili mantienen entre los espa?oles una imagen algo ruda del ej¨¦rcito espa?ol. Pero por lo visto ayer en la Puerta del Sol, poco de eso queda en las tropas espa?olas. En primer lugar, por la presencia masiva de mujeres entre las aspirantes. En segundo, por el alto n¨²mero de inmigrantes que tambi¨¦n se interesan por lo militar. Y por ¨²ltimo, por el notable esfuerzo que realiza el Ministerio de Defensa para dotar al ej¨¦rcito de una imagen joven, aventurera y moderna.

Mayra Paucar tiene 22 a?os, naci¨® en Ambato (Ecuador) y lleva tres a?os en Espa?a, donde ha conseguido la nacionalidad. "Me gusta la idea de lo militar. Me dar¨¢ oportunidades para formarme y crecer como persona", explica con cara de entusiasmo. Dice que le gusta "la aventura", aunque entre los tres cuerpos prefiere el de Tierra: "Me da miedo volar y el mar. S¨ª, me gusta la aventura, pero es que soy muy miedosa", reconoci¨®.

Minutos antes de las 12.00, varios de los presentes se sorprendieron cuando Antonio del Moral Navarrete, de 79 a?os, se sent¨® con aire decidido en uno de los mostradores. "?ste tambi¨¦n se quiere alistar", brome¨® alguien en la cola. El hombre aclar¨® su presencia all¨ª con aire decidido: "Vengo a recoger la informaci¨®n para mi nieto".

Al salir del autob¨²s, Antonio se encontr¨® con siete ni?os de una guarder¨ªa de Villanueva de Perales que estaban de excursi¨®n por Madrid con sus madres "a mirar juguetes". Los peque?os luc¨ªan con orgullo una gorra verde del ej¨¦rcito de tierra, que les hab¨ªan regalado los militares. "A ver si les despierta la vocaci¨®n", brome¨® una de las madres. Despu¨¦s, se qued¨® un segundo en silencio, para a?adir a continuaci¨®n: "?Ay no!, que me har¨ªa sufrir mucho...". Tras otro silencio, la mujer concluy¨® con un sonoro: "?Que hagan lo que quieran!".