Un equipo catal¨¢n cre¨® uno de los programas inform¨¢ticos utilizados en la investigaci¨®n

La participaci¨®n espa?ola en el an¨¢lisis del genoma del rat¨®n se ha centrado en el campo de la bioinform¨¢tica. Roderic Guig¨®, Josep F. Abril y Gen¨ªs Parra, del Grupo de Investigaci¨®n en Inform¨¢tica Biom¨¦dica de Barcelona, han liderado, junto a otros tres grupos de Estados Unidos y Reino Unido, el desarrollo de programas (software) que han permitido, mediante el an¨¢lisis comparativo de los genomas humano y del rat¨®n, "identificar mejor los genes, es decir, aquellos fragmentos del genoma que determinan las caracter¨ªsticas biol¨®gicas del individuo".

El material "importante" representa s¨®lo el 2% del genoma, mientras que el 98% restante est¨¢ formado por lo que se denomina "ADN basura", que seg¨²n Roderic Guig¨®, "est¨¢ formado por largas secuencias de nucle¨®tidos que aparentemente no tienen ning¨²n significado". La identificaci¨®n de los genes entre este extenso material es para los cient¨ªficos una tarea complicada que en esta ocasi¨®n ha resultado m¨¢s f¨¢cil gracias a las herramientas inform¨¢ticas desarrolladas por los cient¨ªficos espa?oles.

El equipo dirigido por Guig¨® -vinculado al Instituto Municipal de Investigaciones M¨¦dicas, la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y el Centro de Regulaci¨®n Gen¨®mica- ya hab¨ªa participado activamente con la firma privada Celera Genomics en la secuenciaci¨®n del genoma humano y el de la mosca del vinagre.

Guig¨® explic¨® ayer que la aportaci¨®n de su equipo en la investigaci¨®n que hoy publica la revista Nature ha sido "m¨¢s relevante" que en los anteriores proyectos. "Hasta ahora desarroll¨¢bamos programas inform¨¢ticos para la predicci¨®n de genes analizando s¨®lo un genoma, lo que limitaba la capacidad de identificar este 2% de material importante".

Piedra Rosetta

"La novedad ha sido ahora el disponer de dos genomas muy similares y cercanos, el humano y el del rat¨®n, y de poderlos comparar", a?ade Roderic Guig¨®. El cient¨ªfico catal¨¢n utiliz¨® un s¨ªmil para explicar la relevancia que el m¨¦todo de la comparaci¨®n ha tenido en su labor: record¨® que Champollion descifr¨® la escritura jerogl¨ªfica y sent¨® las bases para el conocimiento de la lengua del antiguo Egipto comparando los tres textos que hab¨ªa inscritos en la piedra Rosetta en caracteres jerogl¨ªficos, dem¨®ticos y griegos. "Es a trav¨¦s de las comparaciones entre nuestro genoma y el de otros organismos que podemos aprender m¨¢s sobre los humanos", se?al¨® el cient¨ªfico del Grupo de Investigaci¨®n en Inform¨¢tica Biom¨¦dica de Barcelona.

El equipo formado por Roderic Guig¨®, Josep Francesc Abril y Gen¨ªs Parra trabaja desde hace dos a?os en la predicci¨®n de genes desde el punto de vista de la comparaci¨®n de genomas. El programa inform¨¢tico desarrollado en esta ocasi¨®n, explic¨® ayer Guig¨®, es una extensi¨®n de uno anterior, denominado geneid, que permiti¨® analizar la secuenciaci¨®n de una ameba, entre otros organismos.

La bioinform¨¢tica, que tiene por objetivo el desarrollo de herramientas computacionales para el an¨¢lisis de la informaci¨®n biol¨®gica, es una disciplina cient¨ªfica muy reciente. Roderic Guig¨® destac¨® ayer que la investigaci¨®n en biolog¨ªa est¨¢ generando desde hace unos a?os una gran cantidad de informaci¨®n y agreg¨® que todav¨ªa hay pocos cient¨ªficos dedicados a esta materia, as¨ª como a la investigaci¨®n gen¨®mica en general, que, dijo, "puede facilitar much¨ªsima informaci¨®n ¨²til para muchos ¨¢mbitos".

Guig¨® y Josep Francesc Abril son los dos ¨²nicos investigadores espa?oles que en su d¨ªa firmaron la secuenciaci¨®n del genoma humano. Estos investigadores fueron quienes dieron forma gr¨¢fica a la secuencia lograda por Celera, desarrollando una herramienta bioinform¨¢tica que permiti¨® integrar los miles de datos contenidos en la secuencia en una ¨²nica figura.

Una versi¨®n de este programa ya se hab¨ªa utilizado con anterioridad para dar forma al genoma de la mosca del vinagre. Guig¨® explic¨® en aquel momento que la labor que llev¨® a cabo junto a Josep F. Abril en el marco de aquel proyecto era comparable a la de los primeros cart¨®grafos, que recopilaban infinidad de datos sobre tierras desconocidas para reflejarlos en un mapa.