"Pasar y correr, pasar y correr"

"Estudioso, detallista, riguroso, paciente, trabajador en la dificultad, austero y congeniable con la sociedad vasca en general y la guipuzcoana en particular". La definici¨®n de Reynald Denoueix, entrenador de la Real Sociedad, que hoy (21.30, La 2 y televisiones auton¨®micas) visita al Sevilla, corresponde a un entrenador vasco que le conoce desde hace a?os y que no se sorprende de los resultados del equipo donostiarra.

En la pr¨¢ctica, Denoueix no ha hecho sino seguir a pies juntillas la primera lecci¨®n del Nantes, la que inspira toda su escuela: "Pasar y correr, pasar y correr". ?sa es la base, la ideolog¨ªa, el fundamento. Se trata de pasar bien el bal¨®n y correr mucho. Cuanto mejor se pase y m¨¢s se corra, m¨¢s invencible ser¨¢ la jugada. La Real tiene lo primero: Xabi Alonso, De Pedro, Karpin, Aranzabal o Nihat son futbolistas acreditados en el toque. Lo de correr fue tarea de Denoueix, que determin¨® una pretemporada exigente en el trabajo f¨ªsico para extraer frutos de modo inmediato.

Todo se basa en pasar y correr. La escuela del Nantes, el club originario de Denoueix, es un referente en Francia desde los a?os 70. En su pugna con el Auxerre, ha ganado en los ¨²ltimos. Ha creado un estilo que ha acabado imponi¨¦ndose al de su antagonista, en el que prevalece el aspecto f¨ªsico. Ahora ha ido un poco m¨¢s all¨¢ y la actual Real es algo as¨ª como un resumen de esos planteamientos. Si el Auxerre es la fuerza, el Nantes es la frescura. Es decir, si uno es el m¨²sculo, el otro es la idea.

Agotada la v¨ªa Toshack, el enamoramiento sin argumentos, la Real se encontr¨® en la tesitura de dar un golpe de tim¨®n. Denoueix era la primera opci¨®n, entre otras. Prevaleci¨® su esp¨ªritu de cantera, su virtud de trabajar en equipo, su discreci¨®n, su vocaci¨®n de formador de futbolistas..., razones que le habilitaban en la sociedad guipuzcoana, que hab¨ªa vivido los sobresaltos personalistas de John Toshack y Javier Clemente, dos entrenadores volc¨¢nicos y acostumbrados a fagocitar la propia identidad del equipo.

Denoueix lo cambiaba todo. Su discreci¨®n contrastaba con el ego de sus predecesores y su filosof¨ªa futbol¨ªstica trascend¨ªa a la improvisaci¨®n. El Nantes, en el que ha cursado toda su carrera como jugador y entrenador, se basa en una idea: movilidad y espacio, que, traducido al campo, significa pasar y correr. El bal¨®n se da e inmediatamente se gana el espacio siguiente.

La Real lo ha entendido en apenas dos meses. Quiz¨¢s, porque es la lecci¨®n m¨¢s di¨¢fana del f¨²tbol. Denoueix quiere el bal¨®n para ganar terreno. Se defiende el bal¨®n para avanzar, para superar las barreras y acercarse a la porter¨ªa, donde el talento individual prevalece sobre cualquier consigna estrat¨¦gica.

"Ahora mismo, la Real es lo m¨¢s parecido al Manchester United. Es algo as¨ª: combinaciones urgentes para ganar el campo y descontrolar al contrario", afirma el entrenador vasco ya aludido. As¨ª s¨®lo depende de s¨ª misma.

Denoueix ama la m¨²sica cl¨¢sica, no come ni con el presidente y vive cerca de las instalaciones de la Real. No quiere perder tiempo. S¨®lo piensa en pasar y correr, en llegar antes que nadie al punto de destino.