Una exposici¨®n sobre el exilio espa?ol sirve de homenaje a los republicanos
La fundaci¨®n Pablo Iglesias lleva su muestra a la Caja de Granada
La propaganda del r¨¦gimen vencedor pero tambi¨¦n una espesa desmemoria conden¨® al olvido durante a?os al mill¨®n de espa?oles que huy¨® tras la guerra civil. La exposici¨®n sobre el exilio, preparada por la Fundaci¨®n Pablo Iglesias y el museo Reina Sof¨ªa, llega a Granada para recuperar el recuerdo los republicanos que abandonaron Espa?a en 1939. La Caja General de Granada, cuya sala principal acoge la exposici¨®n hasta finales de enero, va a aprovechar esta sobrecogedora colecci¨®n para homenajear a los exiliados andaluces.
La exposici¨®n Exilio se abre con una bandera de la Segunda Rep¨²blica y concluye con la ense?a constitucional. Entre ambos s¨ªmbolos transcurrieron 40 a?os de exilio para muchos espa?oles que pasaron la mayor parte de su vida fuera de su pa¨ªs. Unos volvieron, pero otros murieron en la lejan¨ªa.
Su salida ya fue un cap¨ªtulo tr¨¢gico y moralmente demoledor. Manuel Aza?a cruza a pie con sus ministros la frontera porque el veh¨ªculo se averi¨® en el ¨²ltimo momento; Antonio Machado acaba desterrado con su madre en una pensi¨®n del sur de Francia; el cient¨ªfico Ignacio Bol¨ªvar, con 93 a?os, marcha en busca de un lugar que le permita morir con la dignidad que Espa?a hab¨ªa perdido.
Antonio Claret Garc¨ªa, presidente de la caja granadina y ex parlamentario socialista, mostr¨® su convencimiento en el acto de presentaci¨®n de Exilio de que la historia de Espa?a se puede escribir por la suma de todos sus destierros: "La historia espa?ola ha sido un exilio permanente que comenz¨® en 1492 cuando los Reyes Cat¨®licos expulsaron a los jud¨ªos, que se marcharon con las llaves de sus viviendas con idea de volver un d¨ªa y sigui¨® con la de los moriscos, el exilio de los ilustrados y los carlistas en el siglo XIX, el de los republicanos al final de la guerra civil y que continu¨® en los a?os cincuenta y sesenta con los miles de espa?oles que salieron a Europa en busca de trabajo".
"Espa?a tiene una deuda pendiente con M¨¦xico que acogi¨® a miles de exiliados. Creo que la mejor manera de pagarla es hacer lo mismo con los exiliados que huyendo del hambre o de la guerra recalan hoy en Espa?a", reflexiona el presidente de la caja.
En las pr¨®ximas semanas, y como actos complementarios de la exposici¨®n, los organizadores tienen el prop¨®sito de reunir y homenajear a los supervivientes granadinos del exilio, los que abandonaron el pa¨ªs al mismo tiempo que el escritor Francisco Ayala, el general Emilio Herrera, uno de los precursores de la aeron¨¢utica moderna, el m¨¦dico Alejandro Otero o el profesor Fernando de los R¨ªos, todos ellos granadinos de nacimiento o adopci¨®n.
"Fue una sangr¨ªa terrible", evoca Antonio Claret Garc¨ªa. "S¨®lo cuando cay¨® Catalu?a cruzaron la frontera 400.000 espa?oles, algunos de gran categor¨ªa intelectual. El 15% del escalaf¨®n de catedr¨¢ticos de universidad march¨® al exilio". La exposici¨®n, durante los dos meses y medio que estuvo abierta en Madrid, fue visitada por unas100.000 personas y raro fue el d¨ªa en que no se organizaron colas en el Palacio de Cristal del Retiro.
En Granada permanecer¨¢ hasta el 29 de enero y es posible que ah¨ª termine su recorrido. La muestra re¨²ne testimonios como fotograf¨ªas, documentos del gobierno republicano, enseres personales y s¨ªmbolos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.