Ibarretxe reduce al m¨ªnimo sus comparecencias en el Parlamento

El lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, ha restringido al m¨¢ximo sus intervenciones en el Parlamento vasco, de tal modo que desde las elecciones de mayo de 2001, la C¨¢mara s¨®lo ha podido escucharle en seis ocasiones. Ibarretxe ha roto en esta legislatura con el comportamiento general de los presidentes auton¨®micos e incluso del del Gobierno central, y con la or¨¢ctica que sigui¨® en su mandato anterior, cuando sus comparecencias fueron mucho m¨¢s frecuentes: un total de 42, en un per¨ªodo de tiempo similar. Y lo ha hecho precisamente en el mandato que inici¨® con el anuncio, en la propia sesi¨®n de su investidura, que convertir¨ªa al Parlamento en el "campamento base" de la acci¨®n pol¨ªtica.

En los tres per¨ªodos de sesiones trancurridos, Ibarretxe ha tomado por norma no contestar a las preguntas e interpelaciones que le dirigen los portavoces parlamentarios de la oposici¨®n. As¨ª, el a?o pasado Ibarretxe s¨®lo habl¨® tres veces ante la C¨¢mara y ¨¦ste lo ha hecho otras tres. Sus intervenciones han sido, casi exclusivamente, las de su juramento y toma de posesi¨®n, los plenos monogr¨¢ficos sobre pacificaci¨®n y autogobierno del a?o pasado, y el de pol¨ªtica general de este, en el que present¨® su propuesta de Libre Asociaci¨®n.

S¨®lo en otras dos ocasiones: ha comparecido: una en mayo para contestar a una pregunta de Carlos Iturgaiz sobre la anunciada consulta popular y otra en octubre a la socialista Gemma Zabaleta sobre la violencia de g¨¦nero.

En el resto de las autonom¨ªas aprobadas como la vasca por la v¨ªa del art¨ªculo del 151 de la Constituci¨®n -Catalu?a, Galicia y Andaluc¨ªa, gobernada cada una por un partido distinto-, sus parlamentos tienen establecidos plenos de control semanales o quincenales en los que el presidente del Ejecutivo est¨¢ obligado a responder en persona a la oposici¨®n. As¨ª, Jordi Pujol (CiU) comparece, normalmente cada quince d¨ªas, y los partidos de la oposici¨®n tienen derecho a presentarle tres preguntas cada uno, de las que ¨¦l elige una por grupo. Pujol ha hablado ante su Parlamento en 72 ocasiones (incluyendo los dos debates de pol¨ªtica general) desde julio de 2001, seg¨²n datos de la C¨¢mara catalana.

El presidente de la Junta de Andaluc¨ªa, Manuel Chaves (PSOE), se somete a esas sesiones de control dos jueves al mes. Seg¨²n la informaci¨®n facilitada por el Parlamento andaluz, Chaves ha intervenido en 51 de los 56 plenos celebrados por la C¨¢mara en esta legislatura, en los que ha respondido a un total de 95 preguntas. En cada sesi¨®n de control, su Gobierno est¨¢ obligado a contestar a 24 preguntas y ¨¦l personalmente debe responder a cuatro. La oposici¨®n se las reparte seg¨²n su representatividad.

Hasta el presidente gallego, Manuel Fraga (PP), el m¨¢s refractario de todos a comparecer ante su Parlamento -hasta las ¨²ltimas elecciones y durante doce a?os lo hizo s¨®lo una vez por ejercicio, en los debates de pol¨ªtica general, y jam¨¢s contest¨® a una sola interpelaci¨®n- ha accedido finalmente, incluso desde su mayor¨ªa absoluta, a responder personalmente a las preguntas de los grupos de la oposici¨®n una vez al mes.

Otros tiempos

En el caso de Ibarretxe, el contraste no es s¨®lo llamativo con sus hom¨®logos de otras comunidades, sino incluso con sus propios usos anteriores, ya que en su primer mandato (1999-2001) fue notablemente m¨¢s generoso con su presencia en la C¨¢mara. As¨ª, en 1999 debati¨® con la oposici¨®n en 21 ocasiones y en 2000 lo hizo en 20. En el corto per¨ªodo de actividad del Parlamento en 2001 antes de su disoluci¨®n, intervino otra vez; es decir, protagoniz¨® un total de 42 intervenciones.

Sus comparecencias de ese tiempo no fueron ¨²nicamente las de los grandes debates, entre los que estuvieron tambi¨¦n los del tramo m¨¢s duro de su mandato, como las mociones de censura, sino que ten¨ªa entonces por costumbre responder personalmente a las interpelaciones y preguntas que ahora esquiva de modo sistem¨¢tico. La situaci¨®n fue, durante ese per¨ªodo, la inversa a la actual: la excepci¨®n era que delegara en los miembros de su Gobierno los requerimientos que la oposici¨®n le dirig¨ªa a ¨¦l personalmente. Sin embargo, desde 2001, las dos respuestas citadas a sendas preguntas del portavoz y presidente el PP vasco, Carlos Iturgaiz, y a la diputada socialista Gemma Zabaleta han constituido sus ¨²nicos actos de presencia frente a la oposici¨®n, que se la ha reclamado en 18 interpelaciones y 27 preguntas para su respuesta en pleno; un total de 45 ocasiones.

El lehendakari las ha eludido en su pr¨¢ctica totalidad y ahora delega de forma habitual en el consejero de Industria y portavoz, Jos¨¦ Jon Imaz, en menor medida en la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, y, ocasionalmente, en otros miembros de su Gobierno.

Acusaciones de "ninguneo"

Esta actitud ha provocado reiteradas acusaciones, protestas y reproches de los portavoces de la oposici¨®n, que los han manifestado retirando sus preguntas. Imaz ha defendido la postura del lehendakari reivindicando su derecho a no contestar, ya que las preguntas, ha recordado en la C¨¢mara, se dirigen al Gobierno. "Y aqu¨ª hay un representante del Gobierno dispuesto a responder", le replic¨® en febrero al portavoz del PP, Carmelo Barrio, que acababa de retirar por segunda vez en un corto espacio de tiempo una pregunta por la ausencia de Ibarretxe.

Este "desd¨¦n" hacia la C¨¢mara le fue recordado y reprochado tambi¨¦n el viernes en el debate de las enmiendas a la totalidad de los Presupuestos por el l¨ªder del PSE-EE, Patxi L¨®pez, que acus¨® al lehendakari de "ningunearla": "A un Gobierno se le legitima por su pol¨ªtica y para ello esa pol¨ªtica debe pasar por el Parlamento". L¨®pez sostuvo que el de Ibarretxe es "un Gobierno enfrentado al Parlamento" e "incapaz" de generar en ¨¦l incluso los consensos m¨¢s b¨¢sicos.