Administraci¨®n, sindicatos y los TAP

El pasado d¨ªa 15 de noviembre, los sindicatos CC OO, UGT y CSIF, tras poco m¨¢s de un mes de negociaciones, firmaron con el Gobierno un acuerdo sobre las condiciones salariales y de trabajo de los TAP (Trabajadores de la Administraci¨®n P¨²blica) para los a?os 2003-2004, quedando excluidos de ¨¦l expresamente los cuerpos directivos. Si leemos el acuerdo, entenderemos el por qu¨¦ de dicha exclusi¨®n.

Para empezar, no da impulso alguno a la mejora de los servicios p¨²blicos, pues establece un l¨ªmite muy claro a las ofertas de empleo. No habr¨¢ incrementos de plantilla, aunque supera, al menos sobre el papel, la aberraci¨®n que se ha estado haciendo durante a?os de no cubrir ni siquiera las jubilaciones.

Establece la movilidad forzosa, incluso interprovincial, de acuerdo con los criterios que el Gobierno, de forma unilateral, determine, al mismo tiempo que indica como objetivo el ir progresivamente hacia la jornada partida.

Se introduce una restricci¨®n a la promoci¨®n interna, al poder establecerse como requisito poseer un determinado grado consolidado o desempe?ar cierto tiempo un puesto con un determinado nivel.

Se produce un incremento en los fondos del complemento de productividad, el complemento m¨¢s cuestionado y criticado por su car¨¢cter arbitrario, mientras que el incremento de las retribuciones queda en un 2,7%, cuando al mes de octubre los precios hab¨ªan subido el 4%, y desde el a?o 1993 los empleados p¨²blicos llevan perdido m¨¢s de un 17% de su capacidad adquisitiva, al subir a?o tras a?o las retribuciones por debajo del ¨ªndice de precios de consumo.

Se contin¨²a potenciando la temporalidad en la contrataci¨®n y la precarizaci¨®n generalizada del empleo y del propio servicio p¨²blico, dentro de la l¨®gica de privatizaciones y recortes sociales que caracterizan las pol¨ªticas del Gobierno.

En suma, un acuerdo que lo que pretende es una reducci¨®n de plantillas, movilidad funcional y geogr¨¢fica, cambio en las condiciones de trabajo. Pero lo peor es que algunos ?sindicatos? legitimen con su firma semejante engendro.