Aquellos maravillosos sesenta
Un coleccionista de discos valenciano repasa en un libro la d¨¦cada dorada a trav¨¦s de sus canciones y recuerdos
?Sab¨ªa que la autor¨ªa de la m¨ªtica canci¨®n Twist and shout corresponde a un grupo llamado The Top-Notes y no a The Isley Brothers o, menos a¨²n, a The Beatles? ?Pod¨ªa imaginar que existen hasta 35 versiones del tema Me lo dijo P¨¦rez, popularizado por Los 3 Sudamericanos, y entre ellas una lectura en finland¨¦s realizada por Harri Haka y otra en alem¨¢n registrada por Adamo? ?Ha escuchado alguna vez California dreamin' interpretada por su voz original -la de Barry McGuire- antes de que The Mama's and the Papa's convirtieran la pieza en un ¨¦xito de ventas? Probablemente no. Y, a lo mejor, ni siquiera le importa. En caso contrario (y si, al menos, ha sentido cierta curiosidad), seguramente le interesar¨¢ saber que un valenciano llamado Juan Jos¨¦ Andan¨ª S¨¢ez -y que, entre otras cosas, se define como un friqui de la m¨²sica y presume de poseer una colecci¨®n de discos superior a los 15.000 t¨ªtulos- ha reunido en un libro multitud de an¨¦cdotas y curiosidades como ¨¦stas. El volumen en cuesti¨®n se titula Mis canciones de los sesenta (El libro de las versiones) y, publicado por su propio autor, consta de m¨¢s de 900 p¨¢ginas profusamente ilustradas. Un fara¨®nico proyecto en cuya elaboraci¨®n ha invertido alrededor de una d¨¦cada. "En realidad, todo esto comenz¨® en los a?os ochenta, cuando me inici¨¦ en el coleccionismo discogr¨¢fico y, para tener clasificado todo el material que iba consiguiendo, decid¨ª crear una base de datos (...) As¨ª, poco a poco, he llegado hasta los 400.000 t¨ªtulos y m¨¢s de 35.000 int¨¦rpretes censados", explica Andan¨ª. "Esa base de datos me condujo, casi sin darme cuenta, al libro. De repente, un d¨ªa descubr¨ª que, m¨¢s que archivar datos sin m¨¢s, estaba escribiendo un libro", a?ade.
A partir de ese momento -y consciente de que no exist¨ªa ning¨²n trabajo de esas dimensiones en todo el mundo-, Juan Jos¨¦ Andan¨ª se puso manos a la obra. "Por lo general, la literatura musical gira en torno a los m¨²sicos y lo que yo quer¨ªa era escribir una historia de canciones. Es un libro que a m¨ª me hubiera gustado comprar y, como no estaba en las librer¨ªas, lo tuve que escribir", dice. Precisamente, las canciones que llegaron a lo m¨¢s alto de las listas de ¨¦xitos durante los dorados sesenta sirvieron de hilo conductor a su autor para intentar darle cierta coherencia a un libro de estructura un tanto an¨¢rquica y con incontables detalles, sorpresas y datos deliberadamente desperdigados por todas sus p¨¢ginas. "Mis canciones de los sesenta es como un ¨¢rbol con multitud de ramificaciones, y cuyas ramas son canciones de las que salen otras ramas y as¨ª sucesivamente", comenta. Enredadas entre los brazos de ese imaginario ¨¢rbol se encuentran, por ejemplo, sus propias memorias y recuerdos de una d¨¦cada que, seg¨²n explica en el libro, arranc¨® con su descubrimiento de los primeros conjuntos espa?oles "modernos" (Los Milos, Los P¨¢jaros Locos...). "Es, adem¨¢s, un homenaje a todos esos artistas que nunca aparecer¨¢n en las enciclopedias musicales. Y a esos discos que s¨®lo interesan a los coleccionistas y que no conoce pr¨¢cticamente nadie", a?ade.
Su pasi¨®n por la m¨²sica, por cierto, no se detiene aqu¨ª. Desde mediados de los ochenta forma parte de un par de grupos de rock y en los sesenta lleg¨® a tocar el bajo en una banda que obtuvo cierta repercusi¨®n. Se llamaba Control y cuando, por culpa del servicio militar, Andan¨ª tuvo que abandonar el grupo fue sustituido por, ?sorpresa!, el popular dibujante Ortifus. Cosas de la vida.
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