El medio y el ambiente
"Medio" es el elemento en que vive y se desarrolla un ser vivo, dice el diccionario Clave (ed. SM); "ambiente" es aire, atm¨®sfera; del lat¨ªn "ambiens": lo que nos rodea: el medio. Escribe "medioambiente", y aclara que es "medio (ambiente)". Manuel Seco (Aguilar) dice que "ambiente" es el conjunto de los factores externos que condicionan biol¨®gicamente a los seres"; "medio", escribe luego, es "ambiente, o conjunto de factores que condicionan biol¨®gicamente a los seres". Acab¨¢ramos: "medio ambiente" es una redundancia insoportable. Lo dijo el Rey en Nochebuena; lo oigo a todas horas, sobre todo a los que quieren aparecer como cultos. El ingl¨¦s correcto se dice que es "the Queen (o "King" cuando es un macho) english", el de la reina. Aqu¨ª no es culpa del Rey, que, como en Gran Breta?a, expresa la pol¨ªtica de quienes les gobiernan (a ellos mismos) cuando hablan ex c¨¢thedra (el tilde y la h son de la Academia, donde yace el pobre Ans¨®n), sino porque no hay un espa?ol fundamental para todos. "Medio ambiente" por lo menos distingue el aire que respiramos, y el agua que bebemos, de "medio", que significa ahora aquello en que escribo y hablo (y el pobre Ans¨®n, tipo medi¨¢tico y mediano); "Prensa" ten¨ªa sentido, aunque no existan ya las prensas. "Ambiente" ha adquirido un sentido sexual para bares, fiestas, calles donde personas de inter¨¦s sexual se comunican: tambi¨¦n el "medio" donde ligan.
No culpo al Rey: preferir¨ªa que me gobernase ¨¦l, modesto (p¨²blicamente), en lugar de Aznar; el pr¨ªncipe Felipe, a¨²n m¨¢s afinado que el padre (afinaci¨®n digo; no finura) con lo actual: ?hasta se comi¨® un mejill¨®n, en un acto de valiente solidaridad! No quiero reyes, papas, secretarios generales de partido ¨²nico, sino asambleas. Mas me inquiet¨® el Rey al decir que el "medio ambiente" es algo que hay que dejar en herencia: como una monarqu¨ªa. Si nuestros antepasados hubieran respetado la Naturaleza (con may¨²scula), vivir¨ªamos en las copas de los ¨¢rboles, huyendo de glaciares y diplodocos. La modificaci¨®n de la naturaleza (con min¨²sculas: no mayest¨¢tica) nos ha dado la civilizaci¨®n. Otra cosa es la acumulaci¨®n de capital, que no cesa, que altera la civilizaci¨®n contra la mayor¨ªa. A nosotros, los vivos. Un petrolero p¨²trido destruye; los petroleros sanos ayudan. Quiz¨¢ nuestros sucesores lo cambien: pero a nosotros nos habr¨¢n chapapoteado ya.
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