Justicia 'Express'
Mi amiga Sara acaba de ser nombrada magistrada de su ciudad, y en la despedida se le trasparentaba el susto honesto de una persona preparada y valiente que sabe lo que les va a otras en cada una de sus decisiones, porque antes ha representado a clientes y ahora ser¨¢ suya la pen¨²ltima palabra. No todos los juzgadores (ni todos los cirujanos, ni todos los mec¨¢nicos, ni todos los pilotos) tienen ese sentido de la responsabilidad, pero hoy hablamos de Justicia porque al fin se ponen en marcha unos pocos nuevos juzgados para juicios r¨¢pidos. A ver qu¨¦ pasa. Los jueces de Alicante siguen preocupados: despu¨¦s del Pacto de Estado, se dijo que tres de cada cuatro delitos se resolver¨ªan antes de un mes. Empezaron despachando 20 o 30 semanales, pero por falta de medios en mayo ya se limitaban a sentenciar pronto a los conductores beodos. En junio suspendieron las vacaciones de 300 funcionarios. Los fiscales calificaron el sistema de "inviable" y los abogados de "electoralista".
El caso Ardystil resulta significativo: cuatro a?os de la apertura a las primeras declaraciones, seis meses para fotocopiar el sumario, cuatro jueces distintos... diez a?os (por ahora). Grav¨ªsimas dilaciones que atentan contra la tutela judicial efectiva. En toda Espa?a hay m¨¢s de dos millones de asuntos pendientes y algunos se archivan por sobrecarga. Los togados meditan cron¨®metro en mano antes de disparar sentencias. Los funcionarios y secretarios est¨¢n descontentos con sus condiciones laborales. Jes¨²s Cardenal advirti¨® que hab¨ªa que acelerar y mejorar la imagen del juzgado de Benidorm, por el turismo.
Aunque Valencia cambiar¨¢ con la Ciudad de la Justicia, hay locales de los hermanos Marx con problemas de higiene y seguridad, y piezas de convicci¨®n almacenadas en los aseos. Otros est¨¢n tan colapsados (Torrevieja) que todos huyen del suplicio de ver c¨®mo prescriben delitos. Ahora hay presupuesto para 30 nuevos juzgados, pero faltan 150. El fiscal valenciano Beltr¨¢n pidi¨® 20: se han conseguido siete. Y todav¨ªa parece que las diligencias llegar¨ªan antes siendo trasladadas, como dice su se?or¨ªa Sara, en la mochila de Miguel Strogoff.
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