"Hay una posibilidad muy real de que alg¨²n grupo de granujas clone un beb¨¦"
En noviembre de 2001, la empresa de Massachusetts Advanced Cell Technology (ACT) alcanz¨® las primeras p¨¢ginas de la prensa mundial con su espectacular anuncio de la primera clonaci¨®n de un embri¨®n humano. El trabajo fue criticado por muchos expertos independientes, que consideraban que el experimento era demasiado preliminar: el embri¨®n hab¨ªa detenido su desarrollo cuando s¨®lo ten¨ªa seis c¨¦lulas, mucho antes de alcanzar la fase llamada blastocisto, que tiene m¨¢s de cien c¨¦lulas y es la necesaria para obtener c¨¦lulas madre embrionarias, una gran promesa para la medicina.
Sin embargo, analistas como Lee Silver, catedr¨¢tico de Biolog¨ªa Molecular de la Universidad de Princeton y autor del premonitorio libro Vuelta al Ed¨¦n, advirtieron ya entonces de que, si alguna empresa o instituci¨®n consegu¨ªa clonar un embri¨®n humano ¨²til para la medicina, ¨¦sa ser¨ªa probablemente ACT, que hab¨ªa invertido decididamente en fichar a los mejores cient¨ªficos mundiales en ese campo. La compa?¨ªa ha logrado ya espectaculares avances, como la creaci¨®n de un mini-ri?¨®n de vaca a partir de embriones cl¨®nicos de ese animal. Ahora que la secta raeliana afirma haber clonado no ya un embri¨®n, sino un beb¨¦ completo -una pretensi¨®n a la que ning¨²n cient¨ªfico solvente otorga credibilidad-, este diario ha pedido al vicepresidente de investigaci¨®n de ACT, el especialista en clonaci¨®n e ingenier¨ªa de tejidos Robert Lanza, que eval¨²e la situaci¨®n.
"Es preciso extremar el escepticismo con los raelianos. No han clonado ni un rat¨®n"
Pregunta. Algunos analistas predicen que ser¨¢ su equipo en ACT el primero en obtener un ¨¦xito en el campo de la clonaci¨®n humana.
Respuesta. Ya fuimos los primeros en obtener un embri¨®n humano cl¨®nico. Lo publicamos en la revista cient¨ªfica revisada por pares Journal of Regenerative Medicine el 26 de noviembre de 2001, para que los datos pudieran ser examinados por la comunidad cient¨ªfica.
P. ?Han avanzado desde entonces?
R. Publicaremos cualquier nuevo resultado de la misma forma, en una revista cient¨ªfica.
P. ?Cu¨¢les son los problemas t¨¦cnicos ahora mismo?
R. Ya existe la ciencia necesaria para clonar un embri¨®n humano. Un dato relevante que public¨® en julio Richard Schultz, de la Universidad de Pensilvania, es que la activaci¨®n gen¨¦tica [la reprogramaci¨®n del genoma humano que permite arrancar el desarrollo del embri¨®n] ocurre en el embri¨®n humano muy temprano, en la fase de dos c¨¦lulas. Los embriones de entre 4 y 8 c¨¦lulas, como los que clonamos nosotros en 2001, podr¨ªan muy bien dar lugar a un ni?o cl¨®nico si se implantaran en el ¨²tero de una mujer. Nuestro objetivo, por supuesto, era la clonaci¨®n terap¨¦utica [destruir el embri¨®n para obtener c¨¦lulas madre], no la reproductiva [clonar un ni?o]. Sin embargo, en especies como el rat¨®n, la cabra y el cerdo, exactamente esos mismos embriones cl¨®nicos tempranos, con no m¨¢s de 4-8 c¨¦lulas, dan lugar de forma rutinaria, si se implantan, a animales cl¨®nicos. Incluso en humanos, la tendencia en la mayor¨ªa de las cl¨ªnicas de fecundaci¨®n in vitro de todo el mundo es transferir el embri¨®n al ¨²tero en la fase de 4-8 c¨¦lulas.
P. Pero, si el embri¨®n que clonaron ustedes detuvo su desarrollo en cultivo, ?por qu¨¦ supone que hubiera progresado m¨¢s all¨¢ si lo hubieran implantado?
R. Mantener los embriones en cultivo puede ser problem¨¢tico. El ¨²tero es un medio m¨¢s natural, y provee al embri¨®n temprano con todos los nutrientes y factores adecuados. En los cerdos, por ejemplo, los blastocistos son dif¨ªciles de producir en cultivo, pero la implantaci¨®n de embriones en fase de cuatro c¨¦lulas conduce al nacimiento del clon.
P. ?Otorga usted alguna credibilidad al anuncio de la secta raeliana?
R. En ausencia del menor dato cient¨ªfico, es preciso extremar el escepticismo, especialmente si consideramos el hecho de que los raelianos no tienen ninguna credencial investigadora. Ni siquiera han clonado un rat¨®n, no digamos ya un embri¨®n humano.
P. ?Y el ginec¨®logo italiano Severino Antinori?
R. Aunque tiene m¨¢s credibilidad que los raelianos, es exactamente igual de irresponsable cient¨ªficamente. De todos modos, dado que la implantaci¨®n de un embri¨®n cl¨®nico de 4-8 c¨¦lulas podr¨ªa funcionar, y aunque es claramente inmoral y contrario a la ¨¦tica cient¨ªfica, existe una posibilidad muy real de que alguien como los raelianos, Antinori u otro equipo de granujas clone un beb¨¦ en un futuro cercano, especialmente si tienen recursos y acceso a los suficientes ¨®vulos humanos. Por tanto, no es aconsejable desestimar esos anuncios, sobre todo si se tiene en cuenta que nosotros obtuvimos embriones de esa fase despu¨¦s de s¨®lo tres o cuatro intentos, y con un suministro muy escaso de ¨®vulos.
P. ?Teme que la Administraci¨®n Bush d¨¦ m¨¢s pasos hacia la prohibici¨®n de todo tipo de clonaci¨®n?
R. S¨ª, va a haber una enorme presi¨®n sobre el Congreso para ello. Por supuesto, toda la sociedad, de los cient¨ªficos a los pol¨ªticos, est¨¢ en contra de la clonaci¨®n reproductiva humana -nadie quiere cien copias de Madonna o Michael Jordan-, pero ser¨ªa tr¨¢gico que una atrocidad de tipo raeliano acabara salpicando a una l¨ªnea de investigaci¨®n m¨¦dica que puede curar a millones de pacientes.
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