Extenuaci¨®n
As¨ª ha hablado Javier Arenas, poniendo el acento en la o, escenificando una supuesta voluntad de acuerdo con la Junta de Andaluc¨ªa que en realidad parece que sigue estando lejos.
Es cierto que los ciudadanos muchas veces nos confundimos con la forma en que los pol¨ªticos son capaces de decir al mismo tiempo una cosa y la contraria, pero en este caso no cabe confusi¨®n, es tal cual, Arenas dice al mismo tiempo una cosa y la contraria. Pr¨¢cticamente al tiempo en que quedaron rotas las negociaciones con la Junta de Andaluc¨ªa para acordar los pagos de la deuda financiera, se manifiesta dispuesto a negociar, pero no de cualquier manera, sino hasta la extenuaci¨®n... Es mucho, la verdad. Eso s¨ª, aparte de palabras, nada m¨¢s ha hecho el ministro para demostrar que es cierto que est¨¢ dispuesto a llegar a la debilidad extrema, al cansancio extremo en aras del di¨¢logo.
El Gobierno del PP tuvo su momento dialogante en la primera legislatura cuando a falta de mayor¨ªa absoluta, se entend¨ªa hasta con el PNV y por hacer lo posible y lo imposible hasta el presidente Aznar hablaba catal¨¢n en la intimidad. Eso s¨ª, tanto entonces como ahora el acento andaluz fue solamente el de la sonrisa que exhib¨ªa el ministro Arenas, poco m¨¢s. Hoy el secretario general del PP sigue hablando andaluz, por supuesto, pero su discurso es algo m¨¢s ¨¢cido, aunque de vez en cuando guste de sorprender todav¨ªa con anuncios como ¨¦se sobre su disposici¨®n a la extenuaci¨®n.
La verdad es que no se trata de que nadie enferme, ser¨ªa todo m¨¢s f¨¢cil si se reconociera que puesto que est¨¢ claro que el Gobierno debe, lo mejor es intentar ponerse de acuerdo para pagar de la manera m¨¢s justa y m¨¢s razonable posible. Pero no, el Gobierno pone condiciones, regatea y alarga la posibilidad de saldar la deuda. En crudo y por derecho as¨ª es. Y Javier Arenas es gobierno, por m¨¢s que al tiempo que comulga con su decisi¨®n, intente una pirueta sin m¨¢s riesgo que el de hablar por hablar. Al menos hasta el momento no hay m¨¢s riesgo, ni m¨¢s intento cierto de di¨¢logo.
Porque si lo de que decidan las sentencias, cree el ministro que es extenuarse dialogando, entonces es que el di¨¢logo ya no es lo que era.
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