Calle de Arana
Preparando el viaje a Bilbao para el fin de semana, un amigo me llam¨® para comentar un art¨ªculo publicado en estas p¨¢ginas el 20 de diciembre. Tras leerlo, recuerdo una frase de mi profesor de historia, actual alcalde en una ciudad catalana: "La memoria del ma?ana definir¨¢ al protagonista del ayer". Sin valorar su intencionalidad, el escrito en cuesti¨®n vert¨ªa algunas inexactitudes que es necesario aclarar. Peyorativamente, se usaba el t¨¦rmino "caricaturesco" referido a, entre otras, la Asociaci¨®n V¨ªctimas del Terrorismo, deslizando la idea de que estamos contra el "nacionalismo democr¨¢tico". Falsa acusaci¨®n, m¨¢xime si se tiene en cuenta que entre las m¨¢s de 500 familias que componen nuestro colectivo en Catalu?a est¨¢n incluidas v¨ªctimas de atentados de la extrema derecha y de atentados etarras con v¨ªctimas que votaban a Herri Batasuna, tal como ocurri¨® en Hipercor.
Conocemos sobradamente la historia de la calle dedicada a Sabino Arana y sus nombres anteriores. Pero sigue haci¨¦ndonos sonre¨ªr el hecho de que se cambiara el nombre de Roberto Bassas por el del te¨®rico nacionalista. ?Qu¨¦ l¨¢stima no haber pensado en otro nombre! El tal Arana, en el siglo XIX, postul¨® unas ideas absolutamente racistas, xen¨®fobas y sexistas. Por ello, a la pregunta insidiosa del articulista "?pretenden los protestatarios de hoy avalar la labor depuradora de quienes ganaron la guerra civil?", la ¨²nica respuesta posible es un no rotundo. ?Por qu¨¦ si no se han adherido a la propuesta de retirar ese nombre asociaciones que trabajan exigiendo la igualdad de la mujer o su defensa contra las agresiones sexuales? ?Cu¨¢l puede ser si no la raz¨®n para que grupos tan dispares ideol¨®gicamente como ?gora Socialista, Izquierda Republicana/Partit Republic¨¤ Catal¨¤, Unificaci¨®n Comunista de Espa?a o Foro de Ermua se hayan adherido a la solicitud de retirar el nombre de Arana del callejero barcelon¨¦s?
Lo que realmente cuenta es que, sin importar la ideolog¨ªa pol¨ªtica (si la hubiere), todos los colectivos nombrados y algunos m¨¢s estamos de acuerdo en que Sabino Arana no es un ejemplo digno de imitar. Cuando en el art¨ªculo parecen juistificarse las tesis de Arana diciendo que "ni los complejos de superioridad racial, ni el desprecio hacia otros pueblos, ni la creencia en la inferioridad biol¨®gica de la mujer ten¨ªan en el ¨²ltimo cuarto de siglo XIX el significado que tienen hoy", parece que debemos entender que los esclavos o las mujeres del siglo XIX deb¨ªan conformarse con su situaci¨®n porque era lo normal de la ¨¦poca. Del mismo modo, ?entender¨¢n los historiadores del pr¨®ximo siglo que hoy haya ni?os que trabajen para multinacionales por un d¨®lar al d¨ªa?
En Barcelona hay numerosos nombres de ciudadanos y ciudadanas cuyas vidas han sido destrozadas por maltrato sexista, odio racista, violencia machista o barbarie terrorista. Si es preciso cambiar el nombre de otras calles dedicadas a personajes poco recomendables, ?por qu¨¦ no coordinar otra plataforma de "aguerridos impulsores" para ello? As¨ª habr¨ªa m¨¢s ciudadanos invirtiendo horas, dinero y esfuerzos en homenajear a quien de verdad lo merece.
Podemos asegurar que las v¨ªctimas del terrorismo no nos comemos a nadie. Ninguna de los colectivos antes citados hemos cometido ning¨²n tipo de acto violento contra nadie, ni tan siquiera contra los responsables de nuestras desgracias. El d¨ªa siguiente de un atentado mortal nunca hemos visto a las ocho de la tarde ante las puertas de Hipercor a los que tanto opinan sobre terrorismo, y ya llevamos 35 manifestaciones. Eso tambi¨¦n es historia. Por lo dem¨¢s, no contamos con el respaldo de ning¨²n "corifeo medi¨¢tico e intelectual". Si alguna vez se dignan venir, ser¨¢n bienvenidos como cualquier ciudadano que respeta las ideas ajenas no impuestas por la sangre y el terror. Entiendo que todo barcelon¨¦s tiene derecho a sugerir nombres para las calles de su ciudad. ?Qu¨¦ tal calle de Miguel de Unamuno? ?O ser¨ªa m¨¢s pol¨ªticamente correcto calle del Pa¨ªs Vasco? El Ayuntamiento tiene la palabra.
Robert Manrique Ripoll es delegado en Catalu?a de la Asociaci¨®n V¨ªctimas del Terrorismo.
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