Madrid y Sevilla, en la recta final
El d¨ªa 21 se decide la carrera por ser la ciudad espa?ola aspirante a los Juegos de verano de 2012
Dentro de ocho d¨ªas, el martes 21, la Asamblea del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol (COE), integrada por 128 miembros, decidir¨¢ en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Madrid si es la capital o Sevilla la ciudad espa?ola aspirante a organizar los Juegos Ol¨ªmpicos de verano de 2012. Es la tercera vez que Sevilla lo intenta, tras fallar en 2004 y 2008, pero la primera en la que tiene un rival nacional en la elecci¨®n previa. Madrid vuelve a dar el paso tras perder en 1972. Hasta ahora, s¨®lo Barcelona, que gan¨®, en su quinto intento, los Juegos de 1992, ha sido la gran protagonista y con todos los frutos del ¨¦xito. Las posibilidades espa?olas de ganar ahora siguen siendo escasas. No tanto por el triunfo previo de la ciudad catalana, sino por los muchos clientes que aspiran en el mundo al goloso caramelo de organizar una cita ol¨ªmpica.
La carrera entre Sevilla y Madrid estuvo a punto de terminar a principios de la pasada primavera, cuando la primera aspirante pareci¨® ceder en su impulso de largos a?os. Tras filtrar la segunda muchos mensajes de que lo mejor era que se retirara y le dejara el camino libre luego de haber fallado dos veces, hubo un intento m¨¢s concreto desde principios de enero para unir ambas candidaturas. Pero se frustr¨®. Sevilla, de quien parti¨® la iniciativa, s¨®lo pod¨ªa ser una subsede de Madrid, pero no compartir unos Juegos como al final casi pretend¨ªa. Y era imposible porque el Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional (COI) s¨®lo concede la sede a una ciudad. Ha pasado un a?o, pero el recuerdo ha marcado el proceso.
Alejandro Rojas Marcos, presidente del Partido Andalucista y gran promotor de las anteriores carreras de Sevilla, pero menos implicado ahora, dijo en mayo: "La candidatura ol¨ªmpica de Sevilla ha muerto y no de forma natural". Reiter¨® lo que ya hab¨ªa comentado un a?o antes: "Se est¨¢ dejando morir la candidatura". Y abund¨® en una teor¨ªa que justifica su maratoniana carrera: "Las intenciones de Madrid son muy claras. Saben que no van a tener los Juegos, pero quieren ocupar el liderazgo del deporte en Espa?a y promocionarse con ello. Eso que quiere Madrid es lo que yo quiero para Sevilla, porque la candidatura ol¨ªmpica es una impresionante palanca de promoci¨®n de la ciudad. Es positiva y altamente rentable".
Sevilla no pas¨® el corte para la final de 2004, que gan¨® Atenas ante Roma, Estocolmo -es decir, tres capitales europeas-, Buenos Aires y Ciudad del Cabo. Entonces qued¨® fuera de la elecci¨®n final junto a San Juan de Puerto Rico, R¨ªo de Janeiro, Estambul, ciudad semieuropea, y otras dos completamente europeas, pero no capitales: la rusa San Petersburgo y la francesa Lille. Para 2008 pasaron a la final Pek¨ªn, la vencedora posterior, Toronto, Par¨ªs -capital-, Estambul y Osaka. Sevilla volvi¨® a quedar apeada con Kuala Lumpur, Bangkok, El Cairo y La Habana. A Sevilla le justificaron el suspenso por falta de alojamientos, algo que ni se molestaron en decirle en la oportunidad precedente.
Madrid, hace ya 30 a?os, sin rival nacional y cuando no hab¨ªa cortes previos, perdi¨® ante M¨²nich, la ganadora; Montreal -que organiz¨® los Juegos siguientes, los de 1976- y Detroit.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.