M¨¦xico: descendientes del exilio

LAS COLAS ante el Consulado General de Espa?a en M¨¦xico no son tan nutridas como las observadas en Caracas, pero desde el 9 de enero, cerca de un centenar de mexicanos de origen espa?ol acuden diariamente a las instalaciones de la calle de Galileo, en la capital federal, para solicitar informaci¨®n sobre las posibilidades de ser espa?oles o presentar la documentaci¨®n para conseguirlo. Estados Unidos, de todas formas, sigue siendo el pa¨ªs ambicionado por los mexicanos sin posibilidades de doble nacionalidad. M¨¢s de 200.000 descendientes de padres o abuelos espa?oles podr¨ªan adquirir la nacionalidad de acuerdo con la reforma del C¨®digo Civil espa?ol, que flexibiliza las leyes de ciudadan¨ªa. El Consulado de M¨¦xico tiene registrados a m¨¢s 50.000 espa?oles domiciliados en este pa¨ªs, pero es seguro que su n¨²mero es mucho mayor debido a las oleadas que llegaron antes y despu¨¦s de la Guerra Civil espa?ola (1936-1939). Contrariamente a la amplia difusi¨®n de la reforma del C¨®digo Civil en otros pa¨ªses, en M¨¦xico fue menor. "Dicen que el Gobierno espa?ol ofrece muchas facilidades para tener una casa y estudios", se?ala un ama de casa que acude con su hijo adolescente. "Yo tengo parientes en Canarias, Galicia y Toledo". Pero el grueso de los espa?oles que llegaron a M¨¦xico se instal¨® razonablemente bien y no pocos hicieron fortuna. M¨¦xico recibi¨® decenas de miles de exiliados despu¨¦s de la Guerra Civil, muchos de ellos muy preparados profesionalmente, y esa di¨¢spora ech¨® ra¨ªces. La mayor parte se abri¨® camino en M¨¦xico, y la amargura del exilio se transform¨® en cari?o hacia el pa¨ªs que les abri¨® los brazos. S¨®lo los hijos y nietos de los exiliados conforman una comunidad de m¨¢s de 100.000 personas. Este sector permanece, casi en bloque, en M¨¦xico, pero la gran mayor¨ªa tiene pasaporte espa?ol desde siempre y lo aprovecha para viajar a Espa?a, visitar a la familia y de paso conocer otros pa¨ªses de la Uni¨®n Europea.