Ciria crea un juego entre lo gestual y lo geom¨¦trico en 'El sol en el est¨®mago'

Jos¨¦ Manuel Ciria propone un juego entre lo geom¨¦trico y lo gestual con aires de obsesi¨®n. Ciria (Manchester, 1960) lo hace en la galer¨ªa Mois¨¦s P¨¦rez de Alb¨¦niz, (Larrabide, 21) de Pamplona, donde acaba de presentar la exposici¨®n El sol en el est¨®mago, un trabajo muy distinto al recorrido por la corporeidad humana que centr¨® su muestra en la sala Rekalde de Bilbao en 2001.

Aunque Ciria sigue trabajando la fotograf¨ªa sobre el cuerpo humano, El sol en el est¨®mago es una compleja composici¨®n geom¨¦tricamente abstracta. "Son diferentes ¨¢reas. Las cultivo al mismo tiempo y no acabo nunca de parcelarlas por completo", se?ala el artista. La exposici¨®n es un juego entre lo geom¨¦trico y lo gestual con una pieza central, una bater¨ªa de grandes telones en los que el soporte mat¨¦rico, la textura, sigue teniendo una importancia esencial en el conjunto de la obra, que pende desde las techumbres modificando los espacios.

El artista ha preferido jugar con una reducida paleta de colores. Las manchas originales est¨¢n hechas con negro, blanco y rojo, con los que se siente a gusto. Y sobre ellos despliega unos fondos que var¨ªan del amarillo al gris o del blanco al verde oscuro de las lonas militares recicladas que forman parte del complejo art¨ªstico.

Aficionado a experimentar con diferentes tipos de soportes (carteles publicitarios, vallas, paneles), Ciria ha utilizado PVC, vinilos, lonas pl¨¢sticas, a veces toldos de camiones reciclados y lienzos para plasmar su obra. "Las lonas son un lienzo grues¨ªsimo, un material fant¨¢stico para trabajar en ¨¦l", se?ala.

No obstante, la pintura se adue?a del alma de las instalaciones. "Me mueve la pintura. Si eres pintor te van se?alando con el dedo, diciendo '?mira!, ¨¦se todav¨ªa pinta, se mancha y huele a trementina'. Y tiene gracia porque a los cr¨ªticos yo les insisto en que no soy pintor, en que lo ¨²nico que hago es utilizar la pintura para expresarme", explica Ciria.

Volumen y luz

Alejado del v¨ªdeo y utilizando la fotograf¨ªa "como prolongaci¨®n de la pintura" con fines est¨¦ticos volum¨¦tricos o lum¨ªnicos, Ciria borra las sombras, utiliza cuerpos en lugar de manchas y hace un alto en el camino para exhibir una geometr¨ªa abstracta, presidida por una gran declaraci¨®n de intenciones. Se trata de un enorme mural de texto en el que se adentra en la dificultad del lector-espectador para discernir la simbolog¨ªa e intenci¨®n profunda de un texto-pieza art¨ªstica. "Es una pieza que est¨¢ suspendida, tapando un mensaje de texto que est¨¢ detr¨¢s, y el mensaje hace referencia a la relaci¨®n entre lo que es el discurso te¨®rico y la intenci¨®n aut¨¦ntica de la obra".

Ciria practica en una de sus series el juego de repetir una estructura intentando que cada vez sea lo m¨¢s parecida posible al original. Al trabajar con muchas t¨¦cnicas autom¨¢ticas es casi imposible "hacer un trabajo calcado". Se convierte en un juego de obsesiones por conseguir un clon art¨ªstico que nunca se alcanza.