Abandonados documentos, algunos relacionados con ETA, en la antigua aduana de Coll d'Ares

En el puesto fronterizo de Coll d'Ares, en la comarca del Ripoll¨¨s, anta?o plaza fuerte de la Guardia Civil para controlar la frontera hispanofrancesa, han aparecido abandonados un sinf¨ªn de documentos, algunos con informaci¨®n policial especialmente sensible y marcados con el sello de confidencial y otros referidos a ETA, como un listado de matr¨ªculas de coches de utilizados por la organizaci¨®n terrorista. El edificio de la antigua aduana es hoy un espacio ruinoso, repleto de pintadas, con sus entradas forzadas desde hace a?os y el suelo sembrado de escombros y papeles.

Pero lo m¨¢s llamativo de su abandono es que la Guardia Civil dej¨® al alcance de cualquiera documentaci¨®n oficial entre la que, hasta ayer, pod¨ªan hallarse notas informativas con listados de veh¨ªculos usados por ETA, requisitorias policiales en las que se detallan denuncias de todo tipo -con nombres y apellidos- o formularios vac¨ªos en los que aparecen curiosos encabezamientos: "moral p¨²blica, privada o religiosa", "vicios y virtudes" o "forma de vida en la actualidad".

La informaci¨®n aparecida el lunes en el diario El Punt detallaba casos concretos de documentos en los que se hac¨ªan constar delitos. Entre ellos, fugas de menores, el robo de un malet¨ªn con 3,6 millones de pesetas o un robo de 100 jamones ib¨¦ricos. Entre la multitud de papeles de indudable valor policial, revueltos por todos los moradores que han pernoctado en el edificio, aparec¨ªa un documento fechado en 1987 que alud¨ªa a documentaci¨®n intervenida a militantes de ETA detenidos en Francia a partir de la cual se desprend¨ªa el uso de determinados veh¨ªculos.

La mayor¨ªa de esta documentaci¨®n abandonada durante a?os en el puesto fronterizo hab¨ªa desaparecido ayer por la tarde. Dos patrullas de la Guardia Civil se acercaron al lugar poco despu¨¦s de que este diario llegara al edificio, aunque los agentes no pudieron aclarar si la limpieza de los documentos, realizada presumiblemente durante la ma?ana, era obra de las fuerzas del orden o de los expoliadores. Un portavoz de la Guardia Civil asegur¨®, sin m¨¢s comentarios, que se hab¨ªa abierto una investigaci¨®n sobre el asunto.

El senador Jordi Xucl¨¤ (CiU), que viene denunciando el estado de abandono de los puestos fronterizos de Girona desde hace a?os, asegura que lo ocurrido en Coll d'Ares es "una negligencia muy grave, por no definirlo como un esc¨¢ndalo" y podr¨ªa haber violado el derecho a la intimidad de las personas. Xucl¨¤ asegura que el Ministerio del Interior no puede alegar desconocimiento, puesto que el pasado 16 de diciembre present¨® en el Senado una moci¨®n en la que se detallaba el lamentable estado del edificio y ya entonces alert¨® que las dependencias conten¨ªan documentos oficiales. Xucl¨¤ asegura que hace casi un a?o estuvo en el interior del edificio y, aunque no revolvi¨® los papeles abandonados en los archivos del puesto, le result¨® evidente que conten¨ªan informaci¨®n sensible.

El senador inscribe el abandono de estas instalaciones, refugio de okupas e indigentes, en la situaci¨®n de abandono general de todos los puestos fronterizos. La degradaci¨®n de este puesto contrasta con la del edificio franc¨¦s del otro lado de la carretera, cerrado a cal y canto, pero libre de vandalismo y deterioro.

Pese a que el acuerdo de Schengen de libre circulaci¨®n entr¨® en vigor hace m¨¢s de cuatro a?os, los puestos de Portbou, Puigcerd¨¤ y La Jonquera tampoco se han desmantelado. Algunos de estos edificios, cerrados y deteriorados por falta de mantenimiento, son la primera visi¨®n que tienen los turistas que entran en el pa¨ªs.