"El fin de EE UU es aterrorizar y consagrar su hegemon¨ªa"

El escritor Rafael S¨¢nchez Ferlosio analiza en este art¨ªculo la pr¨®xima guerra contra Irak.

"Aqu¨ª los motivos, fines o "justificaciones", como ustedes dicen, y hasta las consecuencias son barridos por los medios. ?stos son criminales ya sin m¨¢s por el abismo que media entre las partes en potencial guerrero: un atacante que esperar¨¢ la luna nueva porque puede bombardear sin ser visto por las v¨ªctimas, que puede fundirles la luz y los tel¨¦fonos para que no puedan huir ni refugiarse ni saber de los suyos o dar noticia de s¨ª ni enterarse de lo que pasa en otras partes (Dar¨ªo Valcarcel dice que el n¨²mero de v¨ªctimas s¨®lo del bombardeo inicial se calcula entre 50.000 y 200.000); un atacante que ha prefijado esa infamia de la "cuenta atr¨¢s" seg¨²n el clima m¨¢s propicio para ¨¦l y las fechas en que tendr¨¢ completo su despliegue, usa ya unas ventajas que aparejan por s¨ª mismas un tal grado de criminalidad en los medios que arrasa cualquier posible "justificaci¨®n" de los fines o motivos.

Es falso que el Gobierno americano preferir¨ªa una "soluci¨®n diplom¨¢tica"; no hay ya diplomacia cuando ha empezado una "cuenta atr¨¢s". Quieren la guerra: lo demuestra el ininterrumpido despliegue de acero y de soldados frente a Irak, porque saben muy bien que incluso hoy, con el volumen todav¨ªa incompleto, no hay ej¨¦rcito -ni patriotismo popular, en el caso americano- que aguante tama?o ultraje a su honor u orgullo militar como el de que se le diga: "La cosa se ha arreglado, nos volvemos para casa". Lo sabe Rumsfeld, como demostr¨® al decir que incluso si Husein abandonase el poder o fuese derrocado antes del ataque las fuerzas americanas entrar¨ªan de todos modos en Irak: ?c¨®mo quitarles la autoafirmaci¨®n de plantar la bandera siquiera en tal victoria de consolaci¨®n? Pero preferir¨ªan la de las armas y los bombarderos, porque su fin verdadero -no tan secreto como podr¨ªan creer los que no hayan puesto atenci¨®n a las declamaciones del propio presidente- es demostrar al mundo la magnitud del poder que Dios les ha entregado para su misi¨®n en la Historia Universal, aterrorizar toda posible resistencia y consagrar su hegemon¨ªa. La palabra certera la ha dicho Carlos Fuentes: "Hybris".