Los ¨²ltimos restos del alc¨¢zar de los Austrias se apilan en un solar municipal
El gobierno municipal argumenta que son "desechos urbanos sin valor alguno"
Los restos arquitect¨®nicos de la Casa del Tesoro, un edificio hist¨®rico de los siglos XVI y XVII cuyos sillares fueron descubiertos durante las obras de reforma de la plaza de Oriente, en 1996, reposan tirados en el suelo, a la intemperie, entre la maleza y los hierbajos de un almac¨¦n municipal situado en la Casa de Campo, junto a la carretera de Castilla. Se trata de sillares almohadillados y jambas talladas que en su d¨ªa integraron la fachada de esta construcci¨®n real, una vivienda anexa al alc¨¢zar de los Austrias, que sirvi¨® de alojamiento a servidores, invitados, corte y artistas.
Sin embargo, para los responsables municipales estas piezas abandonadas en los dep¨®sitos municipales de la Casa de Campo son simples "desechos urbanos sin valor alguno".
En 1996, el descubrimiento bajo el pavimento de la plaza de Oriente de la fachada y muros de la Casa del Tesoro estuvo rodeado de una gran pol¨¦mica. Pol¨ªticos, historiadores y arque¨®logos protagonizaron una fort¨ªsima batalla en los medios de comunicaci¨®n y en los tribunales. El caso lleg¨®, incluso, al Congreso de los Diputados y al Senado.
Tras varios informes hist¨®ricos sobre la importancia y el valor de estos restos y enormes disputas pol¨ªticas, la Comunidad de Madrid concedi¨® el permiso pertinente para que el Ayuntamiento metiera la piqueta en la plaza de Oriente. Corr¨ªa agosto de 1996. El Ayuntamiento hab¨ªa proyectado un t¨²nel bajo la calle de Bail¨¦n y una d¨¢rsena para autobuses donde siglos antes se levantara parte de la Casa del Tesoro. Nada m¨¢s recibir el permiso de la Comunidad, las m¨¢quinas excavadoras entraron y arrasaron el edificio. S¨®lo se salvaron los sillares de granito y las jambas de ventanas y puertas.
"Espacio evocador"
Unas semanas antes de la destrucci¨®n del yacimiento, un informe pericial hab¨ªa calificado la construcci¨®n hallada como "un espacio espectacular y evocador, casi ¨²nico de la historia de Madrid, ¨ªntimamente ligado a los avatares y reformas de su Real Alc¨¢zar". Y tambi¨¦n como "un conjunto palaciego ¨²nico en el mundo". Otro informe, ¨¦ste del entonces director general de Patrimonio, Jos¨¦ Miguel Rueda, aconsejaba que "las partes arquitect¨®nicas originales o reutilizadas que hayan aparecido durante la excavaci¨®n sean tratadas convenientemente y trasladadas a un lugar adecuado".
La Casa del Tesoro era una dependencia palaciega en la que viv¨ªan los artistas y sirvientes. Diego de Silva y Vel¨¢zquez residi¨® all¨ª. Hoy en d¨ªa, una placa municipal adherida a una vivienda de la plaza es el ¨²nico recuerdo de este hecho.
En su nueva vida, ya lejos de la plaza de Oriente, los restos arquitect¨®nicos salvados de la Casa del Tesoro han pasado a manos del Departamento de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Madrid, propietarios tambi¨¦n del dep¨®sito en el que se encuentran, una antigua escuela de canter¨ªa conocida como La Casilla de Campo. Sin embargo, para los responsables de esta ¨¢rea, tal y como declararon ayer a este peri¨®dico, en dicho almac¨¦n s¨®lo hay bordillos de granito, losas viejas, piezas de recambio o restos de mobiliario urbano. "All¨ª no hay nada catalogado. Lo que hay no tiene ning¨²n valor", declar¨® un portavoz de Obras.
En ese dep¨®sito hay gran cantidad de desechos urbanos, mezclados y revueltos en muchos casos con piezas arqueol¨®gicas pertenecientes a la historia de Madrid. Lo confirma el responsable de Cultura del Grupo Municipal Socialista, Rafael Merino, una de las pocas personas a las que se permite el paso en la Casilla de Campo. "Lo que tienen all¨ª almacenado son restos de la Casa del Tesoro y parte de la muralla ¨¢rabe. La idea del Ayuntamiento es ignorarlo y tenerlo all¨ª sine die. No tenemos noticia de que se est¨¦ trabajando en ello. Lo que sabemos es que los t¨¦cnicos tienen orden de no moverlos ni tocarlos", declara.
"Ha pasado la pol¨¦mica y todo el mundo se ha olvidado de que estos restos son piezas importantes de la ¨¦poca m¨¢s esplendorosa de la Villa. Lo m¨¢s terrible es que el Ayuntamiento hizo una inversi¨®n enorme en un t¨²nel y no en conservar piezas muy importantes de la historia de la ciudad", a?ade el concejal, que opina que en su d¨ªa se deber¨ªa haber previsto en el proyecto un lugar para exhibirlas o una reconstrucci¨®n hist¨®rica. "En ning¨²n caso dejarlas abandonadas", subraya.
Algunos otros objetos de uso diario hallados en la Casa del Tesoro est¨¢n en el Museo Arqueol¨®gico, en Alcal¨¢ de Henares. "Tenemos s¨®lo objetos muebles. Pero en ning¨²n momento nos han encargado que nos hagamos cargo de los restos arquitect¨®nicos", declara su director, Enrique Baquedano.
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