King Crimson busca el equilibrio entre la desesperaci¨®n y la esperanza

Robert Fripp habla de King Crimson, el grupo que fund¨® en 1969, recordando que la formaci¨®n "desaparece cuando no hay nada que hacer y reaparece cuando hay m¨²sica que tocar". En su ¨²ltimo retorno ha formado un "doble d¨²o" con Adrian Belew, Trey Gunn y Pat Mastelotto, del que ha nacido The power to believe, el primer CD de estudio en dos a?os, en el que busca "el equilibrio entre la desesperaci¨®n y la esperanza".

King Crimson "siempre est¨¢ en movimiento, reinvent¨¢ndose en sus sucesivas formaciones, que, para m¨ª, son encarnaciones", dice Robert Fripp en Londres. Y ¨¦l es el tim¨®n creativo de estas "encarnaciones", adem¨¢s de un consagrado guitarrista y music¨®logo. Fripp se refiere a su grupo como una "entidad espiritual, una forma de hacer y sentir, con una estrategia particular para relacionarse con el mundo". The power to believe (El poder de creer, en su traducci¨®n literal) intenta equilibrar dos estados de ¨¢nimo en principio contradictorios: la desesperaci¨®n y la esperanza. "Toda persona que lee la prensa puede razonablemente desesperar. Si no hay m¨¢s oferta que esta informaci¨®n, la vida es entonces muy dura, y lo razonable ser¨¢ rendirse, puesto que nada podemos hacer. Pero, por otro lado, la esperanza es irrazonable, y el amor, incluso m¨¢s poderoso. C¨®mo mantener el equilibro entre la desesperanza y la esperanza en este mundo tan extra?o es la idea que engloba al disco", afirma.

La portada del compacto guarda una estrecha conexi¨®n con su contenido. Reproducida de un cuadro de Pat Crook, representa a una enfermera con m¨¢scara anti-g¨¢s atendiendo a un beb¨¦. En la calle, dos soldados vigilan a la muchedumbre que corre junto a un r¨ªo rodeado de rascacielos. Parece un espejo de Nueva York tras el 11 de septiembre o una apocal¨ªptica visi¨®n de la guerra que se avecina. "El cuadro es de 1999, dos a?os antes del acontecimiento. Es prof¨¦tico e inquietante".

La semana pasada, tras su regreso de Madrid, donde imparti¨® uno de sus cursillos de Guitar craft (Artesan¨ªa de la guitarra), estaba impaciente por atajar cuestiones "candentes". Algunas son dif¨ªciles de condensar, como su permanente persecuci¨®n de ese esp¨ªritu m¨¢gico que arrebata el arte de las manos y mente del artista. Es el duende de Federico Garc¨ªa Lorca y del cante jondo, que tambi¨¦n asoma en la m¨²sica de King Crimson. "Algunas estructuras musicales s¨®lo se pueden interpretar cuando te liberas de los pensamientos. Cuando conf¨ªas en el proceso y, dentro de unos par¨¢metros definidos, prosigues con la esperanza de poder tocar lo desconocido. Si el resultado no funciona, se desecha. No hay que frenar el proceso creativo, sino asumir inocencia dentro de un contexto de experiencia".