El Celta paga su falta de ambici¨®n ante el M¨¢laga

Un golito tempranero y a verlas venir. Est¨¢ por ver que el tanto que marc¨® Jos¨¦ Ignacio en el minuto cuatro de partido fuera la mejor forma con la que el Celta pudo encarar su partido en La Rosaleda, y es que a partir del ah¨ª apenas dio se?ales de vida. Se ech¨® descaradamente atr¨¢s, se dej¨® dominar, perdi¨® el contacto con el bal¨®n, y nunca m¨¢s pis¨® el ¨¢rea rival. Bien es verdad que la ofensiva del M¨¢laga no le incomod¨® en exceso, porque el equipo de Peir¨® estuvo de nuevo falto de ideas para culminar su dominio con oportunidades de gol. Y las pocas veces que lo hizo, el Celta siempre tuvo una respuesta solvente en las manos de Cavallero. S¨®lo en los primeros cinco minutos de la segunda parte el meta argentino tuvo que emplear toda su agilidad para detener sendos lanzamientos ajustados de Josemi y Canabal, y toda su astucia para resolver un mano a mano con Dely Vald¨¦s, al que ya en el primer tiempo le oblig¨® a ajustar tanto un lanzamiento que el paname?o acab¨® echando el bal¨®n fuera en la oportunidad m¨¢s clara del M¨¢laga en todo el partido.

El Celta se encomend¨® a la mala suerte del M¨¢laga. Y al final pas¨® lo que ten¨ªa que pasar, lo que se presagiaba desde que mediada la primera parte el M¨¢laga convirtiera el partido en un asedio constante al ¨¢rea rival, y lo que posiblemente merece un equipo tan r¨¢cano.

Faltaban s¨®lo dos minutos para el final, y en uno de esos numeros¨ªsimos balones que quedaron suelto en las inmediaciones de la porter¨ªa de Cavallero, el canterano Koke meti¨® con astucia la cabeza anticip¨¢ndose al intento de despeje de Berizzo y certific¨® un empate que castigaba la falta de ambici¨®n de un equipo que pelea en los puestos altos de la clasificaci¨®n. Con partidos como el de ayer no tiene explicaci¨®n que el Celta no est¨¦ sumido en el gigantesco atasco de mitad de la tabla.

Al M¨¢laga s¨ª le vino bien el gol tempranero del Celta, porque fue la mejor forma de despabilar y de lanzarse en busca del gol -en los ¨²ltimos cuatro partidos s¨®lo hab¨ªa marcado uno a bal¨®n parado-. Con notables bajas, especialmente las de Dar¨ªo Silva y Musampa, el M¨¢laga domin¨® la situaci¨®n, aunque abus¨® de los centros frontales, que eso si provocaron muchos saques de esquina (10) y barullos en el ¨¢rea, hasta que en uno de ellos, sentenci¨® Koke.