Cruce de caminos
Se le ha reprochado a George Eliot (Mary Ann Evans, 1819-1880) el exceso de filosof¨ªa moral que se encuentra en el interior de sus novelas, pero no conviene olvidar que estamos en plena ¨¦poca victoriana, donde las novelas de tesis y de denuncia social est¨¢n empezando a aflorar ante la situaci¨®n nueva que vive Inglaterra a consecuencia de la Revoluci¨®n Industrial. Benjamin Disraeli, Elizabeth Gaskell y, sobre todo, Thackeray y la por tantos motivos admirable George Eliot, atentas e inteligentes cabezas de su ¨¦poca, est¨¢n buscando la manera de reacomodar sus valores tradicionales y, a la vez, asumir los nuevos. As¨ª, George Eliot, perfectamente consciente de que la ciencia se enfrenta a cuestiones de fe hasta entonces intocables, no dejar¨¢, sin embargo, de sostener los valores de fondo cristiano que se asientan en la compasi¨®n, la honestidad y la rectitud personal. Y por aqu¨ª es por donde podemos empezar a hablar de El molino del Floss, la novela que junto con la maravillosa Middlemarch (Alba, 2001) constituye el m¨¢s alto logro literario de esta mujer que fue un modelo de coherencia, independencia, valor personal y brillantez intelectual.
EL MOLINO DEL FLOSS
George Eliot
Traducci¨®n de Carmen Franc¨ª
Alba. Barcelona, 2003
560 p¨¢ginas. 30,50 euros
La novela cuenta la historia de un matrimonio de clase media rural y sus dos hijos que va a la ruina por su propia incomprensi¨®n del mundo mercantilista que ya afecta a la sociedad entera y al que, empero, no son ajenos otros miembros de la familia tan r¨ªgidos como acomodaticios; entre esas toscas y mediocres personas destaca de inmediato la peque?a Maggie Tulliver, un car¨¢cter audaz, abierto y brillante constre?ido por un c¨ªrculo social estrecho de miras, severamente patriarcal y aferrado a sus principios inmutables de una manera entre grotesca y pat¨¦tica. Sin embargo, ¨¦sa es la vida que hay para la peque?a Maggie. Y la peque?a Maggie es, conociendo la vida de la autora, un trasunto de s¨ª misma, una admirable trasposici¨®n dram¨¢tica de sus vivencias y sue?os de infancia a una persona que no conseguir¨¢ coronar el esfuerzo de confianza en s¨ª misma por construir su destino en un mundo donde las mujeres carec¨ªan de toda actividad que no fuera la propia -y aprobada- de su sexo. Lo cual s¨ª conseguir¨¢ Mary Ann Evans.
Pero tambi¨¦n esta novela es una novela sobre la mezquindad y peque?ez de unas vidas atribuladas por sus propios principios que rodean a la peque?a Maggie. Libertad y ataduras, deseo de ver y ceguera moral, esp¨ªritu y mediocridad: ¨¦stos son los dos pilares b¨¢sicos de la narraci¨®n. En todo caso, la mirada de Eliot -autora omnisciente con todas las de la ley- es compasiva: para Maggie ante todo, pero tambi¨¦n para los miembros de esa amplia familia perteneciente a una sociedad encerrada y pacata que, sin embargo, necesita imperiosamente de los valores de la respetabilidad m¨¢s para defenderse de un entorno que no comprenden que para aplicarlos con estricta maldad a sus semejantes, lo que no dejan de hacer porque as¨ª es la miseria de la vida peque?a.
Maggie Tulliver es un per-
sonaje absolutamente logrado, una obra maestra de creaci¨®n. La conocemos desde su infancia feliz en el molino del Floss y este primer tercio de la novela es, en su conjunto, el m¨¢s logrado. Cuando entramos en un cap¨ªtulo titulado Una variedad del protestantismo que Bossuet desconoc¨ªa, Eliot establece una barrera entre el antes -la infancia- y el despu¨¦s -los acontecimientos propiamente dram¨¢ticos que constituyen el argumento- por medio de una reflexi¨®n de orden moral perfectamente pertinente. A partir de ah¨ª, que ser¨ªa el n¨²cleo expositivo propiamente dicho, la novela se va volcando poco a poco hacia lo melodram¨¢tico. Hay quien sostiene que ¨¦ste llega incluso al patetismo, pero si eso se arguye como defecto, lo dice alguien que es incapaz de reconocer las necesidades narrativas que una novela se impone a s¨ª misma. La novela se escora hacia lo "melo" porque la necesidad de llevar a sus ¨²ltimas consecuencias la tesis o denuncia est¨¢ en la intenci¨®n del autor de modo sustancial. ?sta es una novela sobre la educaci¨®n puritana, sobre la ineducaci¨®n de la mujer, sobre la mezquindad y la estrechez de miras y, con todo ello, sobre la necesidad de todo ser humano, hombre o mujer, de hacerse a s¨ª mismo para respetarse a s¨ª mismo. ?se es el fin ¨²ltimo del libro y el patetismo del final -que debe cerrar un destino tan desgraciado como recto y corajudo- se hace imprescindible para cerrar todos los contrastes sobre los que se edifica el libro.
La novela no s¨®lo se?ala el angustioso cierre que se ejercita sobre todo ser humano femenino que trata de ser alguien con voluntad propia, sino que va mucho m¨¢s all¨¢: en realidad estamos hablando, tambi¨¦n, del deseo de ser, lo que convierte al libro en un universal. La infancia junto al Floss es "esa dulce monoton¨ªa en la que todo se conoce y se ama, precisamente porque se conoce". El paso de esta actitud a la violencia de la vida adulta es lo que cuenta este soberbio libro y es el que hace exclamar a Maggie en un momento de desesperaci¨®n: "Me gustar¨ªa construirme un mundo al margen del amor, como hacen los hombres". George Eliot es de esa clase de escritores que no da puntada sin hilo y que no perdona puntada. Lean con calma, con otra idea del tiempo, con esa lentitud.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.