Un anciano muere asfixiado al incendiarse su vivienda

Luis Montero Prieto, de 78 a?os, falleci¨® ayer al incendiarse la vivienda en la que viv¨ªa con su mujer, situada en el cuarto piso del n¨²mero 38 de la calle de Escosura, en el distrito de Chamber¨ª. El fuego empez¨® alrededor de las ocho de la ma?ana. Los bomberos rescataron a la mujer, de 75 a?os, que ped¨ªa auxilio desde una ventana del inmueble. El fuego no afect¨® al resto de las 11 viviendas del edificio.

El humo y el fuego se apoderaron del piso que ocupaban desde hac¨ªa a?os el matrimonio formado por Luis Montero Prieto y Saturnina Garrido Tofi?o, de 78 y 75 a?os, respectivamente, en la calle de Escosura, 38. Las llamas, que se iniciaron a las ocho de la ma?ana del domingo por causas que todav¨ªa se desconocen, destrozaron parte del vest¨ªbulo de la vivienda y quemaron los muebles y enseres de una habitaci¨®n.

Luis no pudo escapar del humo, que invadi¨® toda la vivienda y le asfixi¨®. Los bomberos del Ayuntamiento de Madrid le encontraron inconsciente, ca¨ªdo delante de la puerta del cuarto de ba?o. Le trasladaron inmediatamente a una habitaci¨®n ventilada en la que iniciaron los trabajos de reanimaci¨®n hasta que llegaron los efectivos del Samur-Protecci¨®n Civil. En un principio se recuper¨® de la parada cardiorrespiratoria, pero poco despu¨¦s falleci¨®.

Su esposa pudo llegar hasta una ventana, abrirla y respirar aire puro, lo que la salv¨®. All¨ª la encontraron los bomberos pidiendo auxilio. La sacaron de la vivienda por la ventana utilizando una escala. Saturnina result¨® herida leve por inhalaci¨®n de humo y fue trasladada al hospital Cl¨ªnico San Carlos para recibir tratamiento.

Mientras tanto, los vecinos de las 11 viviendas restantes bajaron por la escalera del inmueble, ya que el humo no la afect¨®. Esperaron en el patio hasta que finaliz¨® la actuaci¨®n de los bomberos.

"Fue muy r¨¢pido. Recibimos una llamada a las 8.10 y cinco minutos m¨¢s tarde est¨¢bamos all¨ª. El fuego fue extinguido en cuatro minutos", explica el portavoz de bomberos.

Jos¨¦ Antonio, un joven churrero de 20 a?os, fue quien telefone¨® a los bomberos para informar del incendio. No precis¨® el emplazamiento exacto de la vivienda, a la que se accede por un patio de manzana, lo que hizo que los bomberos tuvieran que buscar la entrada correcta. "Pero este hecho apenas retras¨® el rescate un minuto o dos", asevera el portavoz del servicio contra incendios.

La familia que reside enfrente de la vivienda siniestrada, relata c¨®mo Jos¨¦ Antonio les salv¨®. "Es un h¨¦roe. Nosotros est¨¢bamos durmiendo y ¨¦l subi¨® llamando puerta a puerta. Nosotros cogimos a nuestros dos ni?os, de tres a?os y siete meses, y tal como est¨¢bamos, en pijama, bajamos al patio", explica este vecino.

Jos¨¦ Antonio estaba repartiendo churros cuando vio algo de humo saliendo por una ventana de una casa, pero pens¨® que proced¨ªa de un extractor de una cocina. Al poco volvi¨® a pasar por el mismo lugar y observ¨® c¨®mo el humo invad¨ªa ya toda la calle. "Llam¨¦ a los bomberos y sub¨ª corriendo para avisar", recuerda. "En la casa incendiada no me abr¨ªa nadie, por lo que me puse a dar patadas, pero la puerta era blindada y lo tuve que dejar".