El rechazo a la guerra y a la violencia de g¨¦nero centra la entrega de premios Meridiana en Sevilla
Los Goya marcaron la tendencia. Desde entonces no hay ceremonia en la que alguien no deje constancia de su oposici¨®n a un ataque de Estados Unidos contra Irak. La ceremonia de entrega de los premios Meridiana, que concede el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) para distinguir las trayectorias y las iniciativas que trabajan en favor de la igualdad de g¨¦nero y que este a?o han sido para la escritora Dulce Chac¨®n, el periodista I?aki Gabilondo, la feminista Teresa Alba y la empresa Cailu, tambi¨¦n sirvi¨® de plataforma contra la guerra.
Con la popular placa del No a la guerra en la solapa, Dulce Chac¨®n ley¨® su poema El cerco, inspirado durante su reciente visita a la capital iraqu¨ª, Bagdad, en compa?¨ªa de otras mujeres de la Plataforma de Artistas contra la Violencia de G¨¦nero. La escritora record¨® a algunas de las mujeres iraqu¨ªes que conoci¨® en esa visita, a las que dedic¨® el premio del IAM junto a las republicanas que retrata en su libro La voz dormida.
Con esta novela -por la que ha recibido el galard¨®n-, la autora rescata la memoria de mujeres olvidadas: "Un pa¨ªs sin memoria es un pa¨ªs enfermo". Dulce Chac¨®n dijo que su obra era un "homenaje" a esas mujeres republicanas que perdieron "la guerra y la posguerra".
El presidente andaluz, Manuel Chaves, que cerr¨® el acto, tambi¨¦n se detuvo en la situaci¨®n de la mujer iraqu¨ª "sojuzgada ya bajo un r¨¦gimen opresor y para la que parece que no hubiera m¨¢s respuesta que ensanchar su sufrimiento". Chaves a?adi¨® que el Gobierno andaluz ha expresado ya en otras ocasiones que "no es ¨¦se el camino" para dejar clara una vez m¨¢s su oposici¨®n a la guerra.
Sobre la situaci¨®n auton¨®mica, Chaves indic¨® que no podr¨¢ acometerse una segunda modernizaci¨®n "sin el protagonismo de las mujeres andaluzas" y anunci¨® que su Gobierno promover¨¢ un plan estrat¨¦gico para impulsar el reparto igualitario de tiempos y responsabilidades entre hombres y mujeres, que cit¨® como uno de los obst¨¢culos que todav¨ªa no se han superado en la sociedad andaluza.
Una prueba de superaci¨®n es el caso del Centro Andaluz de Integraci¨®n Laboral Unificada (Cailu), una empresa creada por varias mujeres en Alcal¨¢ de Guada¨ªra (Sevilla) en la que trabajan siete discapacitadas, la mayor¨ªa debido a agresiones y malos tratos de sus antiguos compa?eros. Precisamente el periodista I?aki Gabilondo, director del programa Hoy por hoy de la Cadena SER, reclam¨® una ley integral contra la violencia de g¨¦nero para combatir casos de malos tratos.
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