Los t¨²neles de la 'era Manzano'

A finales de este mes o, como mucho, a principios del pr¨®ximo, el alcalde, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, tiene previsto inaugurar el t¨²nel urbano m¨¢s largo de Espa?a: el de Mar¨ªa de Molina, con casi dos kil¨®metros de longitud. Este paso subterr¨¢neo, que unir¨¢ el paseo de la Castellana con la N-II en tres minutos, es el ¨²ltimo de una larga serie de v¨ªas de circulaci¨®n abiertas por el alcalde en el subsuelo de la capital.

Santa Mar¨ªa de la Cabeza, O'Donnell, plaza de Oriente, R¨ªos Rosas-Cristo Rey, Conde de Casal, Alfonso XIII, Rep¨²blica Dominicana, Pr¨ªncipe P¨ªo. En total, m¨¢s de seis kil¨®metros de calzada subterr¨¢nea con un objetivo com¨²n: descongestionar de tr¨¢fico la superficie desviando los coches al subsuelo. El ¨²nico de los pasos inferiores que no ten¨ªa como prioridad esa necesidad de aliviar el tr¨¢fico es el de la plaza de Oriente. En este caso se trat¨® de unir el palacio de Oriente con el resto de la ciudad, antes separados por la calle de Bail¨¦n, siempre llena de coches.

La apuesta por los t¨²neles, muy criticada por PSOE e IU, es defendida a ultranza por los responsables del PP. "Esto no es incompatible con el deseo, que compartimos, de potenciar el transporte p¨²blico. Son f¨®rmulas complementarias", se?ala Sigfrido Herr¨¢ez, concejal de Movilidad Urbana. "No quiero ni pensar c¨®mo ser¨ªa ahora el tr¨¢fico, por ejemplo, en Cristo Rey. El l¨ªo ser¨ªa monumental". Herr¨¢ez recuerda, adem¨¢s, que la opci¨®n de los t¨²neles se abre paso tambi¨¦n en "grandes ciudades como Par¨ªs y Bruselas".

Pero tambi¨¦n hay proyectos que han quedado en el olvido, tras pasar un calvario de cr¨ªticas. Y, a la cabeza, el de las famosas "autopistas subterr¨¢neas". En noviembre de 1998, ?lvarez del Manzano y el entonces ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, presentaron "la obra m¨¢s importante" de Madrid: 140 kil¨®metros de red subterr¨¢nea de autopistas de pago para entrar en la capital a trav¨¦s de 12 t¨²neles y en s¨®lo seis minutos.

IU tach¨® el plan de "monstruosidad", la Comunidad renunci¨® con desd¨¦n a tom¨¢rselo en serio -"el dinero p¨²blico hay que invertirlo en transporte p¨²blico", se limit¨® a decir Ruiz-Gallard¨®n- y el entonces candidato socialista a alcalde, Fernando Mor¨¢n, proclam¨®: "Hay que detener al topo invasor". El alcalde, pese a todo, sigui¨® defendiendo una idea que, seg¨²n dijo, ya propugnaba Leonardo da Vinci para las grandes ciudades.