El coche como ¨ªdolo

Me parece triste ver en algunos medios de comunicaci¨®n el anuncio que, dentro de la campa?a Hoberantz. A m¨¢s promovida por el Ayuntamiento de Barakaldo, bajo el t¨ªtulo "Barakaldo va sobre ruedas", hace eco de una concentraci¨®n de coches tunning. El t¨ªtulo pod¨ªa haber sido la apertura de un bidegorri en este municipio plagado de autom¨®viles, donde conducir requiere grandes dosis de paciencia. Pero no, lo de ruedas va por los coches, de los que, afirma el anuncio, "eran para la mayor¨ªa de usuarios, simples medios de transporte". "Pero siempre ha habido diferencias y es que no es lo mismo circular a los mandos de un BMW M3 que a los de un R-5 GTI cosa que, por experiencia, afirmamos con rotundidad". Encima cachondeo.

El autom¨®vil lo es todo, no es simplemente un medio de transporte; adem¨¢s de tener un coche, encima tiene que ser uno bueno y, encima, se r¨ªen a nuestra cara afirmando que ellos han probado un BMW; claro, es que los dem¨¢s, no tenemos sus sueldos.

A los que no vemos el tunning como una aut¨¦ntica pasi¨®n nos llaman "no creyentes", vamos, como si se tratara de una religi¨®n. El anuncio afirma tambi¨¦n que esta moda causa especial furor entre los j¨®venes; s¨ª en esos mismos que van con la m¨²sica tan alta que no oyes ni la de tu propio coche y que conducen por la carretera como si se tratara de un juego de la Play Station.

Vaya forma de educar a la juventud: el coche es lo importante en esta sociedad, parece que sin ¨¦l ya no eres nadie y, encima, lo tienes que lucir. As¨ª que una no para de ver chavalillos en sus maqueados coches que todas las noches van a casa de sus pap¨¢s a dormir; porque, claro, tener un cochazo tiene un precio. ?Qu¨¦ valores estamos creando en nuestra sociedad cuando parece ser m¨¢s importante tener un coche que una vivienda? Se?ores pol¨ªticos, g¨¢stense nuestro dinero en ayudar a la juventud a acceder a una vivienda y no en promover estos monstruos.

Nuestro querido Ayuntamiento de Barakaldo nos sigue sorprendiendo al afirmar que "todav¨ªa hay quien ve en estas m¨¢quinas engendros peligrosos y de los que hay que huir". Pues con mis 25 a?os debo estar haci¨¦ndome una antigualla y cuando voy por la A-8 debo de ver unas cosas diferentes a los miembros del consistorio baracald¨¦s. El anuncio, para rematar, es sexista, ya que afirma que, seg¨²n el refr¨¢n "la mujer y el coche a nadie has de dejar", que las mujeres, al igual que el coche, somos de la propiedad del se?or-amo. Adem¨¢s, se da ya por hecho que el autom¨®vil es del hombre y no de la mujer.

Suficiente importancia se da ya a los coches para que el dinero p¨²blico se destine a este devorador de ciudades en vez de a otras necesidades m¨¢s b¨¢sicas. Si esto es promover el civismo en la ciudad, prefiero vivir sin civilizarme.