El Bar?a, ante el abismo de Atenas

Todos los focos y c¨¢maras apuntaban a Dejan Bodiroga en el aeropuerto de El Prat ayer a primera hora de la ma?ana, cuando el jugador serbio todav¨ªa se frotaba las bolsas antes de partir rumbo a Atenas donde el Bar?a se juega hoy (20.00, Canal 33) el billete para la final a cuatro que se celebrar¨¢ en el Palau Sant Jordi de Barcelona del 9 al 11 de mayo. ?El pabell¨®n-ratonera del Olympiacos? ?Su p¨²blico? ?Las ansias de revancha? Todas las preguntas se dirig¨ªan hacia la estrella del Bar?a que las ha visto de todos los colores en su dilatada carrera. Pero pocas como las que le sucedieron en los repetidos encuentros que durante sus cuatro a?os en el Panathinaikos, su anterior equipo, le enfrentaron a su rival en el cl¨¢sico griego, el Olympiacos. Y la ¨²ltima, la pasada temporada, fue de las m¨¢s sonadas. El segundo partido de las semifinales de la Liga, acab¨® con cuatro expulsados por bando, ¨¦l fue uno de ellos, y la suspensi¨®n del partido por el lanzamiento de piedras y objetos en el pabell¨®n de la Paz y la de la Amistad, que tan poco honor hace a su nombre. El Olympiacos todav¨ªa arrastra dos puntos de sanci¨®n en el campeonato griego de esta temporada. Por eso tambi¨¦n en Atenas Bodiroga fue asaltado por la prensa griega.

"Tranquilos, que no pasa nada", dec¨ªa en resumen Bodiroga. Esta vez, a causa de las obras de remodelaci¨®n de cara a los Juegos Ol¨ªmpicos del a?o pr¨®ximo y que, al igual que a media ciudad, afectan tambi¨¦n al pabell¨®n de la Paz y de la Amistad, el Olympiacos jugar¨¢ en un peque?o recinto con apenas capacidad para 3.000 espectadores, diez veces menor que la de su cancha habitual y que, de hecho, no pasar¨ªa la homologaci¨®n para acoger un partido de la Liga espa?ola. Se sabe que el club griego ha cambiado la ubicaci¨®n de los bancos de los t¨¦cnicos y los han colocado bajo la grada donde se api?an sus aficionados m¨¢s radicales. "No pasa nada", tranquiliza Bodiroga.

El camino del Barcelona en la segunda liguilla de clasificaci¨®n ha estado repleto de espinas, como no se presum¨ªa cuando se efectu¨® el sorteo. "Desde el primer momento se cre¨® una mala atm¨®sfera en torno al equipo hablando de los fichajes que hab¨ªamos hecho, de la obligaci¨®n de ganar la Euroliga y hasta de que el sorteo de los grupos se hab¨ªa ama?ado y los ¨¢rbitros nos iban a favorecer", lamentaba el entrenador azulgrana Svetislav Pesic.

Nada fue como se hab¨ªa pronosticado. Hasta el punto de que el Barcelona, se ha colocado en una posici¨®n tan delicada como la de hoy frente al Olympiacos. El equipo griego, de ganar por m¨¢s de tres puntos, lograr¨¢ la ¨²nica plaza del grupo para la final a cuatro y dejar¨¢, por tanto, en la estacada al que part¨ªa como gran favorito. El Olympiakos ya indult¨® al Bar?a en el Blaugrana, donde se salv¨® de la eliminaci¨®n gracias a un parcial de 14-2 al final. La preocupaci¨®n de Pesic ser¨¢ neutralizar al alero americano de 24 a?os, Maurice Evans y la capacidad resolutiva desde larga distancia de Tomic y Markovic.