Sorprendentes versiones
La creaci¨®n de la denominada Academia de M¨²sica, que dirige Arturo Tamayo (Madrid, 1946), constituye uno de los empe?os m¨¢s interesantes del Centro de Difusi¨®n de la M¨²sica Contempor¨¢nea en su actual etapa, que rige Jorge Fern¨¢ndez Guerra (Madrid, 1952). Tanto es as¨ª, que me parece necesario que encuentre los apoyos necesarios para continuar.
El martes, ya en plena Semana Santa, en la actuaci¨®n del grupo en la Sala de C¨¢mara del Auditorio pudimos seguir obras de contempor¨¢neos ya desaparecidos, como Franco Donatoni (Verona, 1927-2000) e Iannis Xenakis (Rumania, 1922-2001), y de autores en juvenil madurez como Phillipe Manoury (Tulle, 1952) y Pascal Dusapin (Nancy, 1955). De tan significativas figuras abord¨® Tamayo con la Academia un programa de extremado inter¨¦s, pues en todos los casos, la categor¨ªa, el descubrimiento, el "prospectivismo", como dice Halbreich, la diversificaci¨®n o la fenomenolog¨ªa perceptiva, se unen a la m¨¢s efectiva belleza. Sobre ella se advierten presiones decisivas en el arte actual, desde Messiaen a Pierre Boulez, alguien que, como piensa Fern¨¢ndez Guerra, decidi¨® desde el comienzo que la comunicaci¨®n de las nuevas expresiones ha de estar defendida por una constatada calidad interpretativa. Los j¨®venes m¨²sicos que trabajan en la academia pueden abordar cualquier repertorio de nuestro tiempo: lo entienden, lo comparten y lo impulsan apasionadamente.
Academia de M¨²sica Contempor¨¢nea
Centro de Difusi¨®n de la M¨²sica Contempor¨¢nea. Director: Arturo Tamayo. Obras de Donatoni, Xenakis, Dusapin y Manoury. Auditorio Nacional de M¨²sica. Madrid, 15 de abril.
Naturalidad expresiva
Un Donatoni de 1977, el de Spiri, para 10 instrumentos, hasta cuya "turbadora proximidad" llegan ecos del barroco, se alza desde la sinceridad y el magisterio, mientras el Xenakis de Thallein (cuya "textura granulada", escribe Fern¨¢ndez-Guerra, tiene algo que ver con la de Dusapin) marca con fuerza de su periodo avanzado, esto es, de 1984, una dif¨ªcil conquista de la naturalidad expresiva.
De Pascal Dusapin apenas conoc¨ªamos alguna obra interpretada por Gerard Causs¨¦, cuando se alza en el panorama franc¨¦s como singular¨ªsimo representante del "posboulezismo". Hop, escrita para el Ensamble Intercontemporaine en 1985, se desarrolla en una combinatoria de varios grupos instrumentales que en conjunto obedecen a una sutileza po¨¦tica de gran intensidad y a una perfecta estructuraci¨®n. Manoury parece formar pareja "cultural" con Dusapin, quiz¨¢ por compartir con ¨¦l su voluntad renovadora de la ¨®pera; en su Passacaille pour Tokio evoca el principio insistente del passacagli que puede reducir en un inteligente efecto basado en la repetici¨®n de una nota. P¨¢gina de talante sinf¨®nico muy claro e incisivo obtuvo de Arturo Tamayo un nivel interpretativo de excelencia, a tono con el mantenido durante toda la tarde. La audiencia mantuvo una atenci¨®n participativa y ovacion¨® con entusiasmo todas y cada una de las partituras.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.