Jorge Sempr¨²n: "Me parece positivo que resuciten los cad¨¢veres de nuestra guerra"

"En esta Espa?a de hoy todav¨ªa tenemos un problema con nuestra memoria, y yo soy un viejecito que tiene demasiada". Eso explica, seg¨²n Jorge Sempr¨²n, que el coloquio internacional Jorge Sempr¨²n o las espirales de la memoria, organizado entre ayer y hoy por la Universidad de Girona, sea el primer simposio sobre su obra que se organiza en Espa?a. El acto es un claro homenaje al escritor, mucho m¨¢s acostumbrado a recibir agasajos en Francia y Alemania.

El pintor Antoni T¨¤pies, amigo del escritor (Madrid, 1923) y que, al igual que ¨¦l, cumplir¨¢ los 80 a?os el pr¨®ximo diciembre, le hizo entrega del cartel pintado expresamente para estas jornadas.

Sempr¨²n considera un signo de normalidad el creciente inter¨¦s por la recuperaci¨®n de la memoria hist¨®rica que est¨¢ surgiendo en Espa?a, fen¨®meno en el que inscribe la exhumaci¨®n de las tumbas an¨®nimas de los fusilados por el franquismo. "Que los cad¨¢veres de nuestra vieja guerra resuciten me parece l¨®gico y positivo, siempre que no se utilice eso para volver a la confrontaci¨®n civil, sino para esclarecer la memoria y consolidar la raz¨®n democr¨¢tica", explic¨® a este peri¨®dico.

El escritor mantiene que la memoria vuelve porque la transici¨®n "se fund¨® en la amnist¨ªa y la amnesia", a pesar de que en aquel momento el olvido era necesario para "reconstruir la convivencia". ?l mismo tard¨® cerca de 17 a?os en escarbar dolorosamente en su memoria para dar forma literaria a su internamiento en Buchenwald.

Con la mesurada iron¨ªa que le ha permitido recrear literariamente las duras experiencias del campo de concentraci¨®n, en el que estuvo recluido de los 19 a los 21 a?os, el que fue ministro de Cultura de Felipe Gonz¨¢lez asegur¨® sentirse ayer como quien contempla su entierro desde la primera fila. Con una confesada "extra?eza" no exenta de inter¨¦s, intervino activamente en el coloquio, en el que participan estudiosos de la historia, la pol¨ªtica, la filosof¨ªa, el cine y la literatura.

Javier Pradera, viejo amigo suyo de la etapa clandestina, explic¨® que Sempr¨²n hab¨ªa encarnado cuatro modelos sucesivos de intelectual. Empez¨® por el intelectual tradicional y sigui¨® con el modelo leninista, "mostrando un incre¨ªble valor como dirigente clandestino". Despu¨¦s se convirti¨® en un intelectual respetado por la sociedad y dedicado a una causa c¨¦lebre: la denuncia del socialismo real. Finalmente, seg¨²n Pradera, ejerci¨® el cada vez m¨¢s infrecuente cargo de "intelectual en el poder". Josep Ramoneda, que particip¨® en el debate junto a Pradera y Francesc Vicens, destac¨® que la mejor aportaci¨®n literaria de Sempr¨²n se encuentra en el debate que establece consigo mismo sobre c¨®mo explicar "el mal absoluto" de Buchenwald, que consigue hacer aflorar "una punta casi obscena de felicidad en la peor de las experiencias". El periodista Octavi Mart¨ª a?adi¨® que, a su juicio, parte de la atracci¨®n que siente Francia hacia Sempr¨²n, que nunca ha dejado la nacionalidad espa?ola a pesar de residir en el ese pa¨ªs, se debe al "mito republicano".

El simposio analiza tambi¨¦n la labor como guionista cinematogr¨¢fico de Sempr¨²n. El cr¨ªtico Esteve Riambau asegura que las colaboraciones con Costa-Gavras, para quien escribi¨® tres pel¨ªculas, muestran "con elocuencia y lucidez las contradicciones de la dial¨¦ctica de la historia".

Sempr¨²n publicar¨¢ en oto?o (Tusquets) su primera novela escrita en lengua castellana, centrada en la memoria de la Guerra Civil de una familia espa?ola. Asegur¨® que la historia que pretend¨ªa contar requer¨ªa volver a su idioma materno. El escritor explic¨® que dentro de pocos a?os ya no quedar¨¢n testigos directos de los campos nazis y que deber¨¢n ser los novelistas quienes retornen esa memoria. Sempr¨²n cit¨® a Javier Cercas, que hoy cierra las jornadas con otro debate, como ejemplo de que "la ficci¨®n puede apoderarse de la memoria y prolongarla".